Recomiendan Vigilar e Inspeccionar Obras de Construcción del Puente Nichupte para Evitar Impactos Ambientales

• Antes de la construcción ya se traían áreas de alerta de contaminación mayor.

• Hay zonas de anidación de la cacerolita que deben vigilarse y que están marcadas en las condicionantes.

Olivia Vázquez/ CAMBIO 22

CANCÚN, Q. ROO, 18 de marzo.- Centinelas del Agua advierte que si no hay inspección y vigilancia en el sistema lagunar Nichupté para garantizar la salud de este cuerpo de agua durante el proceso de construcción del puente de la Laguna Nichupté, el tema se puede salir de las manos y generar un fuerte impacto ecológico al principal activo de Cancún.

Alejandro López Tamayo, director general de Centinelas del Agua, recordó que durante 2019 a 2021, la organización ambientalista realizó varios monitoreos en el sistema lagunar donde se detectaron algunos sitios que ya presentaban condiciones arriba de la norma oficial de la calidad de agua, como lo sería la laguna interna del amor, donde se tiene un centro dentro de la laguna y en donde se encontraron concentraciones más elevadas de contaminantes.

Si bien, dijo que la mayoría del sistema lagunar Nichupté presentaba, hasta 2021, una salud general, incluso dentro de la laguna Bojórquez, que hoy luce eutrofizada (de color verde), ya se tenían algunos puntos de atención que se deberían dar seguimiento.

En el caso de la laguna Del amor, refirió que se tiene la mayor contaminación derivado por la cercanía que se tiene hacía la población de Bonfil, donde no se tiene drenaje.

“Creemos que todas las descargas de agua de Bonfil que no tiene drenaje, salen por esa zona y pudiera impactar la calidad de agua”, expresó.

Sin embargo en el resto del sistema, se tiene una ventaja que son sus manglares que funciona bien como un gran filtro y tratamiento de aguas natural, de ahí que no se ve reflejado ningún tipo de contaminación e la zona de playas, a diferencia de Playa del Carmen, donde la contaminación si se ve directamente reflejada en la zona de playas.

En el caso de Cancún, ahora que se presenta la construcción del puente de la Laguna Nichupté, indicó que algo que siempre se ha mencionado por Centinelas del Agua, es la importancia de mantener un monitoreo constante del agua, evaluando sobre todo los sólidos suspendidos y vigilar el ecosistema para ver si no se afectan las especies que ahí habitan.

En este punto recordó que justo en la laguna Nichupté se tiene una zona de anidación de las cacerolitas de mar, (enlistada en la NOM-059-SEMARNAT-2010 como especie en peligro de extinción), muy cerca de donde pasarían los pilotes del puente, por lo que es fundamental que se mantenga un monitoreo.

“Habría que estar muy pendiente sobre todo si está cambiando o no el flujo de agua derivado del movimiento que se está dando y recordemos que muchos de los contaminantes si se llegan a caer en el sedimento, al momento de removerlos, quedan por decir, disponibles en la columna de agua, eso se deber estar vigilando”, expresó.

De las condiciones y de todo el seguimiento que debería tener este cuerpo de agua ahora que se da una de las construcciones más grandes para el destino, el especialista refirió que se desconoce hasta el momento si se están dando esos monitoreos en la calidad del agua, mismos que debe solicitar la autoridad a quien ingreso la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) sea Fonatur, Marina o el promovente, quien sería el responsable de estar presentando estos estudios para evitar un impacto a la zona.

Y es que, refirió que el objetivo de estas obras, debe ser evitar el menor impacto posible, pero sino se tiene inspección y vigilancia, se puede salir de las manos el impacto que se pudiera generar, de ahí que es importante, recomendó, que se de una vigilancia al cumplimiento de estas condicionantes que están marcadas en el proyecto.

El llamado al cumplimiento de las condicionantes marcadas para el proyecto del puente de la Laguna Nichupté ya se ha dado por parte de otras organizaciones y empresas del medio ambiente.

o.vazquez@diariocambio22.mx

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