¿Cuándo Empiezan a Hablar los Bebés? Este Estudio lo Confirma y Cambiando Todo lo que Sabíamos

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Una investigación revela que los bebés pueden identificar y diferenciar sonidos de lenguas como el hindi o el mandarín a una edad temprana, demostrando que tienen una capacidad innata para el lenguaje.

Redacción/CAMBIO22

Durante mucho tiempo, los científicos creían que los bebés comenzaban a distinguir los sonidos del habla entre los seis y los doce meses de edad, en un proceso llamado ajuste perceptual. Sin embargo, una investigación reciente publicada en Developmental Science indica que esta capacidad se desarrolla incluso desde los cuatro meses, desafiando lo que se sabía hasta ahora sobre la adquisición del lenguaje.

El estudio, llevado a cabo con bebés de entre 4 y 6 meses, evaluó su respuesta a sonidos de distintas lenguas. Los resultados muestran que a esta temprana edad ya pueden identificar y diferenciar sonidos de idiomas desconocidos, como el hindi o el mandarín, lo que sugiere que nacen con una capacidad innata para percibir una amplia gama de fonemas.

Cómo los bebés aprenden a diferenciar sonidos

Para examinar esta habilidad, los investigadores diseñaron un experimento en el que los bebés debían asociar sonidos con imágenes animadas. En este ejercicio, se presentaron dos “mini-lenguajes”: uno con sonidos labiales como “b” y “v” y otro con sonidos producidos con la punta de la lengua como “d” y “z”.

Sorprendentemente, los bebés fueron capaces de detectar patrones y asociarlos con las imágenes, lo que indica que no solo escuchaban pasivamente, sino que también estaban procesando activamente las reglas fundamentales de los sonidos.

La relación entre el sonido y el movimiento en el aprendizaje

Uno de los hallazgos más impactantes del estudio fue que los bebés no solo reconocen sonidos, sino que también comienzan a vincularlos con los movimientos físicos que los generan. Cuando observaban a una persona moviendo los labios para producir sonidos labiales o usando la lengua para sonidos distintos, mostraron mayor interés si los movimientos coincidían con lo que habían escuchado previamente.

Esto sugiere que los bebés integran información auditiva y visual para entender cómo se forman los sonidos, lo que podría ser una base esencial para el desarrollo del lenguaje. Esta capacidad de observar y procesar el habla podría ser un primer paso crucial en la adquisición de palabras y estructuras lingüísticas.