• Actualmente, el servicio de regreso desde Felipe Carrillo Puerto a Tulum es prácticamente inexistente o poco frecuente, “De regreso casi no hay corridas; la gente tiene que esperar mucho tiempo y no hay un paradero cómodo, eso es lo que queremos resolver”, enfatizó el líder transportista.

 

Redacción/ CAMBIO 22

TULUM a 18 de agosto.- La ruta de transporte público entre Tulum y Felipe Carrillo Puerto, que debería ser una vía de conexión clave para cientos de usuarios que se trasladan diariamente por motivos de trabajo, estudios o trámites, se encuentra limitada y con un servicio deficiente debido a conflictos entre sindicatos. El principal problema: la falta de acuerdos claros entre las organizaciones transportistas que tienen jurisdicción en ambos municipios, lo que ha derivado en largas esperas, ausencia de paraderos adecuados y una movilidad cada vez más complicada para la población.

Moisés Pool Quijano, secretario general de la UNTRAC sección 2 en Tulum, explicó que desde hace meses se han sostenido conversaciones con líderes de otros gremios para reabrir de manera formal la ruta, pero de momento se busca una apertura limitada: de Tulum hasta la comunidad de Muyil, que funcionaría como punto de conexión y transferencia con las unidades que cubren el tramo hacia Felipe Carrillo Puerto.

“Estamos en la mejor disposición de llegar a un acuerdo, pero este debe ser respetuoso de la jurisdicción de cada sindicato”, señaló Pool.

La propuesta contempla que en este esquema participen la sección 1 de UNTRAC en Carrillo Puerto —encabezada por Edin Alfaro— y Raúl Alcocer, del sindicato Tiburones del Caribe en Tulum. El objetivo es establecer un modelo de cooperación que permita a las tres organizaciones operar sin conflictos y garantizar que el servicio llegue a la gente sin recurrir a bloqueos, confrontaciones o violencia.

Actualmente, el servicio de regreso desde Felipe Carrillo Puerto a Tulum es prácticamente inexistente o poco frecuente. “De regreso casi no hay corridas; la gente tiene que esperar mucho tiempo y no hay un paradero cómodo. Eso es lo que queremos resolver”, enfatizó el líder transportista.

Como parte de la estrategia, UNTRAC ya cuenta con un terreno en Muyil, propiedad del sindicato, donde se planea instalar un paradero formal en conjunto con la delegación de Carrillo Puerto. Este espacio contará con techo, bancas, baño y sombra, para evitar que los usuarios esperen de pie bajo el sol o bajo la lluvia. Según Pool, la meta es que este punto de transferencia esté completamente listo para el 20 de este mes, marcando un primer paso hacia la reapertura total de la ruta.

El dirigente recalcó que esta solución no solo responde a una necesidad de movilidad, sino también a la obligación de los sindicatos de respetar los límites territoriales y las competencias de cada organización. “No somos de violencia ni de causar problemas a las autoridades; lo que queremos es que la gente pueda moverse a diferentes colonias y comunidades, y que se haga de forma ordenada y segura”, afirmó.

Mientras tanto, usuarios de la ruta siguen padeciendo un servicio irregular, con corridas incompletas y la incertidumbre de si podrán regresar a Tulum sin largas esperas. El proyecto de conexión en Muyil, de concretarse, podría aliviar en parte el problema, pero su éxito dependerá de que las dirigencias sindicales cumplan con los acuerdos y se priorice el beneficio de los pasajeros por encima de los intereses internos.

 

 

redaccionqroo@diariocambio22.mx

RHM

 

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