• La presidenta evitó emitir reconocimientos o felicitaciones tras la controversial ratificación de la funcionaria, cuestionada por su desempeño al frente de la CNDH

 

Redacción/CAMBIO 22

Sin reconocimientos ni felicitaciones fue como la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo respondió a la pregunta de un posicionamiento respecto a la imposición de Rosario Piedra Ibarra para que fuera reelecta como titular de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).

La presidenta negó ahondar en el tema, se limitó a decir “es una decisión del senado la que se tomó ayer (…) y hasta ahí”, ello después de una sesión extensa con múltiples recesos y complicaciones para convencer a los legisladores del oficialismo que se oponían a la imposición de la candidata peor evaluada y la más criticada por organizaciones civiles y de protección de derechos humanos por su cuestionable administración al frente de la CNDH.

Al mismo tiempo, trascendidos señalaban que Nashieli Ramírez Hernández, la mejor evaluada de todos los perfiles y actual presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, era el perfil que la presidenta Claudia Sheinbaum quería para dirigir el organismo a nivel nacional.

Del mismo modo, voces criticas dentro del oficialismo señalaron no estar conformes con la imposición, pues a su parecer se requería de un relevo en la CDNH pese a lo que se había resuelto de manera interna entre los legisladores de Morena en el Senado, sin embargo, la indicación para que por unanimidad y con el “apoyo” fuera reelecta Rosario Piedra.

La decisión en el Senado provocó rechazó por las organizaciones civiles; como fue el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Prodh), que denunciaron “premia” el debilitamiento institucional, la inacción y pérdida de autonomía al ignorar los estándares internacionales sobre no reelección de Ombudsperson.

 

 

 

Fuente: Infobae

redaccion@diariocambio22.mx

HTR/MA

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