Clase Política Busca Desaparecer la Débil Cultura de los Derechos Humanos en México
18 Jul. 2024
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Necesariamente Incómoda
Graciela Machuca Martínez/CAMBIO 22
La clase política en México se ha encargado de construir un discurso sobre que los derechos humanos son una moda, porque mientras hablan desde las trincheras de la oposición sus integrantes son fieles defensores y constructores de la cultura derecho humanista, pero al tener un espacio de poder, por mínimo que sea, los principios de los derechos humanos se convierten en un lastre incómodo que lo desechan en cuanto se les presenta la oportunidad.
Sin embargo, para la sociedad la defensa y protección de los derechos humanos no es una moda, porque debe actuar en consecuencia contra los agentes del Estado que se empeñan en inhabilitar los derechos fundamentales que han costado muchas décadas de sangre en el pueblo mexicano, esté quien esté en el poder político y/o económico de esta nación.

Los derechos humanos de periodistas y de personas defensoras de los derechos humanos, así como de toda la población mexicana corren un grave riesgo cuando la clase política prefiere guardar silencio ante la evidente cultura del autoritarismo que se ha ido conformando día tras día en este país.
Ante la violencia sistemática en contra de las personas defensoras de derechos humanos y periodistas, así como la vulneración constante de los derechos laborales en todo el país, es oportuno recordar que en el mes de diciembre de 2023, el periodista Ricardo Hernández Ruiz, recibió el Premio Breach/Valdez de Periodismo y Derechos Humanos 2023 por su trabajo de investigación: “El otro Cancún: bravo, marginado, irregular”.
A través de este trabajo, que en Quintana Roo se minimizó su importancia, quizás porque ya son normales este tipo de anomalías, retrata la cara oculta de la ciudad más turística de México: barrios grises y cinturones de miseria donde no existe un conjunto de derechos humanos, reseña un comunicado de la Oficina de la ONU-DDHH en México, instancia copatrocinadora el referido premio.

En el documento se dice que a través de testimonios de trabajadoras, migrantes, refugiadas, desplazadas y asentadas irregularmente, Ricardo Hernández Ruiz propone un viaje inaudito por el famoso balneario del estado de Quintana Roo.
Noticias ONU entrevistó al periodista Ricardo Ruiz y uno de los cuestionamientos que le hizo sobre su trabajo es el siguiente:
–Cancún es el destino turístico más importante de México. Usted vive en Cancún y decidió pintar su cara oculta. Dio un retrato de la población trabajadora que contribuye al funcionamiento del centro turístico y para quien la promesa de una vida mejor se quedó en un sueño. ¿Cómo viven esas familias y por qué es urgente hablar de ellas?
–Cancún es un caso particular porque es una de las ciudades más nuevas de México. Tiene casi 53 años de vida y no había hasta ahora un registro periodístico que diera cuenta de la historia de esta ciudad. No como polo turístico sino más bien que hablara e hiciera una suerte de corte de caja sobre las personas que viven ahí y que, a fin de cuentas, mantienen la industria del turismo. Estoy hablando de los meseros, de las camaristas, de las personas que trabajan en el mantenimiento y de todos los demás trabajadores que llegan hasta casi los cien mil.

Durante la entrevista, narró que le interesaba “conocer cuáles eran las condiciones, a 50 años de su creación, de estas personas y me di cuenta de que, mientras en la mañana atienden y limpian suites lujosas, por las noches se van a sus casas donde el techo es una simple lámina, las paredes un pedazo de madera y tienen apenas colchonetas donde poder descansar después de arduas jornadas laborales. Entonces, para mí era un poco indigno y una urgencia contar la otra cara del destino turístico. Por un lado, hay mucho lujo, hay mucha ostentación, pero por el otro, trabajadores a los que no les ha ido nada bien”.
–Retrata también múltiples violaciones de derechos humanos, como los abusos de autoridad, robos, malos tratos, violencia doméstica, trato de los migrantes. ¿Cuál es la historia que más le afectó y por qué?
–Creo que la historia que más me afectó fue la que abre el reportaje sobre Eugenia Chim Iuit, una persona proveniente de Yucatán, de orígenes indígenas, que perseguía, como miles de personas, el sueño Cancún. Es una suerte de trampa, porque la mayoría de la gente llega como Eugenia a este lugar y se encuentra con una renta alta que no puede costear con el salario que recibe.
Ante esta realidad, dice Ricardo Ruiz, se ven obligados a buscar opciones y allí donde se encuentran con “estos asentamientos irregulares donde se violan varios derechos humanos como el derecho a la vivienda, el derecho a la educación -los niños no tienen escuelas disponibles-, el derecho a la salud porque no hay hospitales ni clínicas en estos sitios por ser irregulares y porque el Estado no puede invertir en sitios así. No tienen derecho a la justicia porque no hay oficinas donde poder denunciar un delito. Es además una de las zonas más peligrosas para ser mujer. Se viola el derecho al acceso al agua. Por estar en una situación irregular, no hay drenaje ni tuberías para abrir el grifo y tener agua, entonces lo que ellos hacen son pozos irregulares para tener agua del manto freático, lo cual también se vuelve un riesgo para la sostenibilidad hídrica en tanto que se extrae irregularmente, pero también se vierten los desechos orgánicos, humanos al manto freático y se hace una suerte de contaminación. Entonces son varios temas pendientes por atender”.
El texto completo del reportaje, publicado en 2022, se puede leer en:
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