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• El gigantesco desfile se celebra en la plaza de Tiananmén con motivo del 80º aniversario de la rendición de Japón y el final de la II Guerra Mundial.

 

• Según Reuters, el presidente Xi Jinping apareció con un traje al estilo del fallecido líder chino Mao Zedong, con el presidente ruso Vladimir Putin y el líder norcoreano Kim Jong Un caminando a ambos lados.

 

Redacción/CAMBIO 22

PEKÍN, 3 de Septiembre.- El presidente chino, Xi Jinping, advirtió que el mundo enfrenta una elección entre la paz o la guerra al realizar el miércoles el mayor desfile militar de la historia de su país , flanqueado por el ruso Vladimir Putin y el norcoreano Kim Jong Un.

El fastuoso evento para conmemorar los 80 años de la derrota de Japón al final de la Segunda Guerra Mundial ha sido en gran medida rechazado por los líderes occidentales, con Putin y Kim -parias en Occidente debido a la guerra de Ucrania y las ambiciones nucleares de Kim- como invitados de honor.

Diseñado para proyectar el poderío militar y la influencia diplomática de China, también llega en un momento en que los aranceles comerciales y las políticas volátiles del presidente estadounidense Donald Trump tensan sus relaciones con aliados y rivales por igual.

“Hoy, la humanidad se enfrenta a la elección entre la paz o la guerra, el diálogo o la confrontación, ganar-ganar o suma cero”, dijo Xi a una multitud de más de 50,000 espectadores en la Plaza de Tiananmen, añadiendo que el pueblo chino “se mantiene firme en el lado correcto de la historia”.

Luego, a bordo de una limusina descapotable, Xi inspeccionó las tropas y el equipo militar de última generación, como misiles, tanques y drones, en exhibición.

Helicópteros con grandes pancartas y aviones de combate volaron en formación durante la manifestación de 70 minutos cargada de simbolismo y propaganda que culminó con la liberación de 80,000 palomas de la paz y globos coloridos.

Con un traje al estilo del exlíder Mao Zedong, Xi saludó previamente a más de 20 líderes en la alfombra roja, incluyendo al presidente indonesio Prabowo Subianto, quien hizo una aparición sorpresa a pesar de las protestas generalizadas en su país. Se pudo escuchar a la esposa de Xi, Peng Liyuan, decir “Mucho gusto” y “Bienvenidos a China” a varios de los invitados en inglés.

Sentado entre Putin y Kim, Xi inició repetidamente conversaciones con ambos líderes en la galería de observación mientras las tropas y el material desfilaban ante ellos.

“Por favor, transmitan mis más cálidos saludos a Vladimir Putin y a Kim Jong-un, quienes conspiran contra Estados Unidos”, dijo Trump en una publicación en Truth Social al inicio del evento. También destacó el papel de Estados Unidos en ayudar a China a lograr su independencia de Japón.

Trump había declarado previamente a la prensa que no consideraba el desfile un desafío a Estados Unidos. El principal portavoz del gobierno japonés declinó hacer comentarios sobre el desfile, añadiendo que las dos principales economías de Asia estaban forjando “relaciones constructivas”.

 

VISIÓN PARA UN NUEVO ORDEN GLOBAL

Xi ha presentado la Segunda Guerra Mundial como un importante punto de inflexión en el “gran rejuvenecimiento de la nación china“, en la que ésta superó la humillación de la invasión japonesa para convertirse en una potencia económica y geopolítica.

A principios de esta semana, Xi dio a conocer su visión de un nuevo orden global en una cumbre de seguridad regional, llamando a la unidad contra “el hegemonismo y la política de poder”, un ataque apenas velado a su rival del otro lado del Océano Pacífico.

“Xi confía en que la situación ha cambiado. Ahora es China la que vuelve a tomar el control”, afirmó Wen-Ti Sung, miembro del Global China Hub del Atlantic Council, con sede en Taiwán.

“Ha sido el unilateralismo trumpiano más que la diplomacia del guerrero lobo de China cuando la gente habla de la principal fuente de incertidumbre en el sistema internacional”, añadió.

Más allá de la pompa, los analistas están observando si Xi, Putin y Kim pueden indicar relaciones de defensa más estrechas luego de un pacto firmado por Rusia y Corea del Norte en junio de 2024, y una alianza similar entre Beijing y Pyongyang, un resultado que puede alterar el cálculo militar en la región Asia-Pacífico.

Putin ya ha aprovechado la ocasión para sellar acuerdos energéticos más profundos con China, mientras que la reunión le ha dado a Kim la oportunidad de obtener apoyo implícito para sus armas nucleares prohibidas.

Kim, debutando en su primer gran evento multilateral, se convirtió en el primer norcoreano en asistir a un desfile militar chino en 66 años.

Viajó a Pekín con su hija Ju Ae , a quien la inteligencia surcoreana considera su sucesora más probable, aunque no fue vista junto a él en el desfile.

 

PASOS IMPRESIONANTES

En los últimos dos años, más de una docena de generales, muchos de ellos exalumnos de Xi, han sido purgados del Ejército Popular de Liberación en una amplia ofensiva contra la corrupción.

“El desfile permite a Xi centrar la atención mundial en sus impresionantes avances en la modernización de su armamento militar, al tiempo que eclipsa los persistentes desafíos que afligen al EPL, en particular las continuas purgas que se están produciendo en las filas de sus oficiales de mayor rango”, dijo Jon Czin, analista de política exterior de Brookings Institution, un centro de estudios con sede en Estados Unidos.

El desfile no sólo tenía como objetivo proyectar el poderío de China al mundo exterior, sino también galvanizar el espíritu patriótico en el país, dijeron los analistas.

En su discurso inaugural, Xi calificó el rejuvenecimiento de la nación china de “imparable”. Funcionarios de todo el país se han encargado de observar el desfile y plasmar sus reflexiones, según declaró uno de ellos a Reuters.

Nada quedó al azar en esta importante reunión.

Las principales carreteras y escuelas fueron cerradas en Beijing para el desfile, la culminación de semanas de minuciosos preparativos de seguridad y ensayos de medianoche.

Los gobiernos locales de todo el país movilizaron decenas de miles de voluntarios y miembros del Partido Comunista para monitorear cualquier signo de posible malestar en torno al desfile, según muestran estimaciones basadas en avisos de reclutamiento en línea.

 

 

Fuente Reuters

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