• El Gobernador de Yucatán, Joaquín Díaz Mena, anunció que se otorgarán créditos a las artesanas para financiar su actividad económica.

 

Selene Tamayo/ CAMBIO 22 

MÉRIDA, YUC., 03 de diciembre.- Desde la zona arqueológica de Uxmal, el Gobernador de Yucatán, Joaquín Díaz Mena, y el director del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Diego Prieto Hernández, encabezaron la ceremonia donde 200 bordadoras de 12 municipios recibieron certificaciones como transmisoras de conocimientos culturales tradicionales.

Durante el evento, el Gobernador reiteró su objetivo de incluir el bordado maya en el inventario nacional del patrimonio cultural. Este paso busca respaldar una eventual solicitud ante la UNESCO para que esta tradición sea reconocida como Patrimonio Intangible de la Humanidad.

Aunado a lo anterior, anunció que se establecerá un programa conjunto con el Gobierno Federal para otorgar créditos a las artesanas a través de la Secretaría de Fomento Económico. Según lo señalado, este apoyo pretende fortalecer la actividad artesanal y generar mayores oportunidades económicas para las bordadoras.

Por su parte, Diego Prieto Hernández enfatizó que el bordado maya es una tradición única que incluye 34 técnicas específicas, además de múltiples variantes. También señaló que esta iniciativa busca proteger la autenticidad del trabajo de las bordadoras, reduciendo el impacto de imitaciones en el mercado.

El proyecto principal, denominado Desarrollo Económico y Social con Perspectiva de Género sobre el Bordado Maya Yucateco, derivó en un Plan de Salvaguardia enfocado en desarrollar políticas educativas, económicas y culturales que garanticen la continuidad de esta práctica.

El diagnóstico del proyecto, elaborado con el apoyo de especialistas como Fidencio Briceño Chel, Elisa Echeverría Chim y Silvia Terán y Contreras, fue autogestionado por las propias bordadoras. Esto permitió identificar los desafíos y oportunidades que enfrenta esta actividad.

La participación incluyó a bordadoras de 12 municipios y se abordaron tres áreas principales: Patrimonio Cultural Intangible, Modelo de Negocios y Finanzas, y Masculinidades. Estas líneas de trabajo guiaron el desarrollo del diagnóstico y las estrategias.

Se llevaron a cabo 36 talleres de diagnóstico y tres encuentros regionales, en los que participaron 320 bordadoras. Durante estas actividades, las artesanas compartieron experiencias y establecieron redes de colaboración para el intercambio de saberes.

Como resultado, se creó una lista de 168 acciones prioritarias para proteger el bordado maya y garantizar su continuidad.

 

 

techeverria.selene@gmail.com

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