Redacción/CAMBIO 22

El costo por pagar de la Militarización de la seguridad pública en México, volvió a cobrar con creces la simplezas de planeaciones que se toman en una administración altamente politizada e incapaz para frenar ese cáncer herencia del pasado llamado narcotráfico.

Si bien, se podría tratar de un ajusticiamiento extrapolicial por parte de los elementos del Ejército, sin lugar a dudas que se dieron elementos para asesinar a un grupo de jóvenes que no se detuvieron para seguir las indicaciones de las fuerzas castrenses en una fría madrugada del norte del país.

Versiones no confirmadas alegan a favor de los militares que entre los muertos se encontraba un miembro del cartel del Noreste, lo que nos lleva a deducir que la propia sociedad encubre a los miembros del crimen organizado, pues una gran parte de los jóvenes actuales son estudiantes y trabajadores de día, aunque la noche los transforma en miembros destacados del crimen organizado.

Somos una sociedad narcotizada, que vive y consecuenta a los criminales mientras no seamos víctimas de ellos.

Hoy CAMBIO 22, recopila el trabajo de varios medios de información para apegarse estrictamente a la verdad y usted pueda juzgar y calificar este incidente que lesiona de nuevo al consentido Ejército Mexicano.

En un comunicado de prensa publicado ayer, el Ejército aparentemente admitió que los soldados dispararon contra los hombres sin provocación en Nuevo Laredo.

Mientras tanto, el informe oficial de la policía afirma que los soldados escucharon disparos justo antes de disparar, al tiempo que revela que no se encontró nada ilícito en el vehículo.

Los resultados de la investigación militar

Alrededor de las 5:00 p. m. del 28 de febrero de 2023, las fuerzas armadas enviaron un comunicado de prensa que presentaba los hallazgos actuales de su investigación sobre el incidente de Nuevo Laredo. Dice lo siguiente:

La Secretaría de la Defensa Nacional informa a la ciudadanía sobre los hechos ocurridos el 26 de febrero de 2023 en la ciudad de Nuevo Laredo, Tamaulipas.

Aproximadamente a las 4:50 am del domingo 26 de febrero de 2023, personal militar de una base en Nuevo Laredo, que realizaba un reconocimiento en el casco urbano, como parte de la seguridad pública, escuchó disparos, lo que los puso en alerta, y avanzaron hacia el ruido.

Luego, vieron una camioneta tipo pick-up con siete personas a bordo, quienes circulaban a exceso de velocidad con las luces apagadas y sin placa. Los ocupantes del vehículo, al observar la presencia de los efectivos, aceleraron su velocidad de manera temeraria y evasiva, y luego chocaron contra un vehículo que se encontraba estacionado.

En esta situación, luego de escuchar un fuerte ruido, los militares dispararon sus armas; este aspecto está siendo investigado actualmente por diversas autoridades gubernamentales con el fin de determinar su veracidad.

Inicialmente, una persona resultó ilesa, otra resultó herida y cinco murieron. La persona que resultó herida fue atendida médicamente, solicitando el apoyo de una ambulancia para trasladarlo a un establecimiento de salud.

En respuesta a estos hechos, se tomaron las siguientes acciones:

– Coordinación con la Fiscalía General de la República (FGR), a fin de colaborar con las investigaciones y diligencias para la integración del expediente de investigación.

– Coordinación y estrecha colaboración con la Comisión Nacional de Derechos Humanos, a fin de facilitar sus investigaciones.

– Las investigaciones correspondientes por parte de la Fiscalía General de Justicia Militar, respecto de las actuaciones realizadas por el personal involucrado en el ámbito militar.

– Se abrió un diálogo con las familias, a través de la Unidad de Enlace Ciudadano del Ministerio de la Defensa Nacional, a fin de brindar la asistencia correspondiente para este tipo de casos.

El Ejército y la Fuerza Aérea Mexicanos reafirman su compromiso de trabajar en estricto apego al estado de derecho y con pleno respeto a los derechos humanos, brindando todas las facilidades a las autoridades y a los organismos nacionales y estatales de derechos humanos, dando cumplimiento a cualquier resolución que determinen las autoridades. .

– El Ejército y la Fuerza Aérea,

La Gran Fuerza de México

Una sección clave de la declaración está redactada de manera extraña. El Ejército escribió “en esta situación, al escuchar un fuerte ruido, personal militar disparó sus armas”. Lo expresa como una declaración de hecho y no como una acusación.

La primera frase termina con un punto y coma y la oración continúa diciendo “este aspecto está siendo investigado actualmente por varias autoridades gubernamentales para determinar su veracidad”, lo que parece implicar que no es una cuestión de hecho, sino algo que todavía está siendo investigado.

El Informe Oficial de la Policía

Recientemente, el periódico español El País publicó lo que alegan es el informe oficial de la policía sobre el incidente, con las correcciones correspondientes.

Si bien el comienzo del informe es prácticamente el mismo, luego comienza a proporcionar una serie de nuevos detalles importantes que no se incluyeron en el comunicado de prensa del Ejército.

El informe policial dice lo siguiente:

“Eran aproximadamente las 5:00 am del 23 de febrero de 2023, estando en servicio desde la base de operaciones El Laguito a bordo de 4 vehículos militares siendo el primero una camioneta Cheyenne n. (…), La segunda una camioneta Cheyenne n. (…) , siendo el tercero otra camioneta Cheyenne n. (…) y  el cuarto un Sandcat n. (…) , con 20 soldados a bordo de los 4 vehículos a las  órdenes del Capitán Segundo de Caballería (…)”.

Mientras hacíamos labores de reconocimiento y  patrullaje por la calle Mier, en la colonia Cavazos Lerma, escuchamos disparos y -sin saber de dónde provenían los disparos- llegamos a la calle Huasteca donde vimos un vehículo tipo pick-up color blanco que aceleró al ver la presencia militar, entonces empezamos a seguirlo”.

“Doblamos a la derecha por la calle Huasteca, observando que el vehículo acababa de chocar con otro vehículo”.

“ Habiendo llegado a la intersección de las calles Huasteca y Méndez, el vehículo se detuvo después de avanzar otra cuadra y dos de nuestros vehículos n. (…) y (…) llegaron al mismo punto y escucharon nuevos ruidos de disparos”  .

” En ese momento, yo, como Capitán Segundo de Caballería, responsable del personal antes mencionado, escuché que varios soldados comenzaron a disparar sin que yo diera la orden de hacerlo, así que usé la radio para ordenar un alto el fuego”  .

“Después de eso, bajé del vehículo y pregunté quién había disparado. Los siguientes cuatro elementos respondieron voluntariamente que sí:

– Cabo de Caballería (…)

– Cabo de Caballería (…)

– Cabo de Caballería (…)

– Cabo de Caballería (…)”

“Una vez que cesaron los disparos, acordonamos el área y el cabo y yo (…) comenzamos a inspeccionar el vehículo en el que encontramos a 5 hombres, 3 muertos, 1 herido y otra persona que no resultó herida”.

“Los hombres fallecidos fueron ubicados (respectivamente) en (1) el asiento del conductor, (2) entre el conductor y el pasajero delantero, (3) en el lado derecho del asiento trasero. 

El hombre herido estaba ubicado en el lado izquierdo del asiento trasero y el hombre ileso estaba en el centro de la plataforma de carga de la camioneta. Fuera del vehículo, encontramos 2 hombres fallecidos adicionales”.

“Entonces, aproximadamente a las 5:20 am, informé a la alta dirección de los hechos de este incidente y solicité que el personal de la Fiscalía General comenzara a recolectar pruebas de la escena”.

El testimonio del testigo 

El País también publicó secciones del presunto testimonio de Alejandro Pérez, de 21 años, el hombre que sobrevivió ileso al incidente.

Escriben: “El joven explica que él y sus amigos fueron a una discoteca de la ciudad el sábado por la noche y cómo, de regreso, un convoy militar comenzó a perseguirlos”.

“Luego explica que uno de los camiones militares chocó con su vehículo por detrás y cómo, inmediatamente después, los soldados comenzaron a disparar. Insiste en que ninguno de ellos [sus amigos] disparó antes. De hecho, insiste, no lo hicieron. llevar armas”.

“Cuando me bajé de la camioneta, escuché a los militares decir: ‘¡mátenlo, mátenlo!’ Me tiraron al suelo. Luego escuché dos disparos más, y luego vi a mi hermano tirado en el suelo”.

“Alcancé a ver cómo un soldado le disparó a mi amigo que ya estaba herido. Él [el amigo] pidió una ambulancia, pero un soldado le disparó de nuevo”.

“Entonces ellos [los soldados] me preguntaron si quería vivir o morir y les dije que quería vivir. Y me dijeron que admitiera nuestra culpa, mientras me filmaban, admitiera que estábamos huyendo, lo cual no es cierto”.

Alejandro Pérez dice que finalmente cedió y repitió lo dicho mientras un militar grababa el mensaje con su celular.

La Historia de los Cinco Asesinados en Nuevo Laredo; Un Presunto Sicario del CDN entre los Muertos. Sin Embargo Denuncian Violación de Derechos Humanos

En un confuso evento matutino, soldados del Ejército mataron a tiros a cinco hombres en la ciudad fronteriza de Nuevo Laredo, Tamaulipas. Se alega que uno de los asesinados es miembro del Cartel del Noroeste.

El hecho provocó acusaciones de ser una ejecución extrajudicial, lo que ha provocado violentas protestas de civiles. Un grupo local de derechos humanos, que anteriormente había sido acusado de trabajar con narcos, alega que los hombres asesinados eran inocentes.

El contexto

El incidente tuvo lugar en la ciudad de Nuevo Laredo, en el estado de Tamaulipas, que contiene uno de los puertos de entrada más transitados a lo largo de la frontera entre México y Estados Unidos. Se cree que la ciudad está controlada por el Cártel del Noreste (CDN), un grupo que se escindió de Los Zetas después de que se fracturaron.

En general, se cree que CDN ha tenido menos éxito que otros grupos de cárteles en la infiltración y corrupción de las fuerzas militares locales. Casi todas las semanas, los sicarios del CDN aparecen en los titulares al participar en sangrientas escaramuzas con el personal militar.

El incidente inicial

Alrededor de las 5:00 am del domingo 26 de febrero de 2023, seis hombres viajaban dentro de una camioneta Chevrolet Silverado blanca en la colonia Cavazos Lerma cuando su vehículo se topó con soldados de la SEDENA.

Lo que sucedió después no está claro. Lo único cierto es que, en algún momento, la camioneta blanca chocó contra un vehículo estacionado y los soldados dispararon contra los hombres que estaban adentro, matando a cinco e hiriendo a uno.

El hombre que sobrevivió sufrió dos heridas de bala y fue trasladado a un hospital cercano. Sus lesiones se describen como no mortales y se espera que se recupere.

Por el momento, el Ejército no ha emitido un comunicado dando su versión de los hechos.

Esto se debe a que el Ejército aún está realizando una investigación sobre lo sucedido, entrevistando a los soldados que estuvieron presentes y revisando las imágenes de vigilancia.

La Fiscalía General de la República (FGR) también está realizando una investigación sobre lo ocurrido.

La única versión de los hechos que está disponible actualmente proviene del Consejo de Derechos Humanos de Nuevo León, un grupo local cuya credibilidad se discutirá más adelante en este artículo.

El grupo publicó una carta que presenta los hallazgos de su propia investigación sobre el evento.

Alegan que la camioneta blanca “recibió más de veinte tiros cuando se encontraba en el cruce de Husteca y Méndez. Vecinos del sector aseguran que al menos dos jóvenes recibieron disparos en la nuca mientras estaban tirados en la acera”.

La gente reacciona al incidente, los soldados responden

Más tarde esa misma mañana, soldados del Ejército se encontraron con un grupo de civiles cerca de la escena del crimen cuando intentaban remolcar la camioneta blanca.

Raymundo Ramos, el jefe de ese grupo local de derechos humanos antes mencionado, habló con el diario  El Sol de Tampico y explicó por qué creía que la multitud se enfureció.

Dijo que “la actuación de los lugareños se debió a los soldados del Ejército que intervinieron en estos hechos. En lugar de llamar a las autoridades investigadoras, decidieron traer una grúa y llevarse el vehículo –suponemos remolcándolo hasta el cuartel militar. es una obstrucción de la prueba, gravísima, es una forma de borrar sus crímenes y mentirle al pueblo de México”.

El País parece disputar su afirmación, escribiendo que hablaron con “una fuente del gobierno de Tamaulipas que dijo que los expertos forenses de la FGR procesaron la escena del incidente”.

Las imágenes muestran que los civiles intentaron evitar el remolque de la camioneta y, a partir de ahí, las cosas se intensificaron. Los momentos exactos en los que los desacuerdos verbales se convirtieron en un altercado físico se pueden ver en los diversos videos incrustados a continuación.

El Sol de Tampico escribe que hubo “empujones entre los vecinos y los militares. Los vecinos tiraron piedras, caños y palos, mientras los militares reaccionaron con tiros al aire y al suelo”.

Según los informes, ningún civil resultó herido debido a los disparos, que solo causaron daños a la propiedad. En las imágenes se puede ver a varios soldados siendo agredidos por civiles.

Los civiles intentaron bloquear los vehículos militares para evitar el retiro de la camioneta. Durante el caos del incidente, un soldado cayó al suelo y fue atropellado por un vehículo militar.

Las personas involucradas

Según los diarios Reforma , El Universal y Animal Político , los hombres que fueron baleados por los soldados fueron nombrados:

Gustavo Pérez Beriles

Wilberto Mata Estrada

jonathan aguilar sánchez

Alejandro Trujillo Rocha

Gustavo Ángel Suárez Castillo (presunto estadounidense)

Luis Gerardo (sobrevivió con heridas)

Un familiar alega que Gustavo Ángel Suárez Castillo es ciudadano estadounidense. Un portavoz del Departamento de Estado de EE. UU. dijo que había visto informes de esto, pero que no podía confirmar esa información “en este momento”.

Los periodistas Raúl Flores Martínez (de Grupo Imagen) y Joaquín López-Dóriga (de Milenio) han denunciado que Wilberto Mata Estrada es un sicario del CDN conocido con los alias de “Mando Willy” y “El Mata”.

En publicaciones en las redes sociales, Wilberto Mata Estrada ha posado abiertamente con un chaleco táctico con las iniciales del cartel.

El grupo polémico

Dado que la mayoría de los reclamos sobre el incidente actualmente provienen del Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo, examinemos su credibilidad.

Como se mencionó anteriormente, el grupo local de derechos humanos está encabezado por un hombre llamado Raymundo Ramos Vázquez, quien ha sido acusado varias veces de connivencia con grupos de cárteles.

En junio de 2015, el líder arrestado de Los Zetas, Ramiro Pérez Moreno, alias

le dijo a los fiscales sobre su arreglo con Raymundo Ramos.

Nación 14 escribe que El Ramas “afirmó haber pagado a Raymundo Ramos cinco mil dólares semanales para realizar operativos contra la Armada y presentar denuncias contra personal militar, así como para realizar diversas protestas contra el gobierno y otras autoridades”.

Quinta Fuerza Tamaulipas, escribe que Ramos también fue pagado por Los Zetas para acusar a los militares de “secuestro, como una forma de presión para retirar las fuerzas federales” de la región. Otros dos jefes del CDN (El Pato y El Sonrics) habrían hecho pagos similares a grupos locales de derechos humanos.

Ramos ha estado en el centro de un caso similar que involucra a CDN antes. En 2019, su grupo alegó que los militares mataron injustamente a un grupo de civiles. Frente a las cámaras de noticias, Ramos abogó codo con codo con Irma Rendón, la madre de una víctima asesinada por los militares. Irma afirmó que su hijo era inocente y trabajaba en un lavado de autos.

Más tarde se supo que el hijo fallecido de Irma,  José Indulfo Cepeda Rendón, era un líder operativo del CDN que se hacía llamar “El Manchas”.

Dirigió la célula de sicarios Tropa 202 y supuestamente publicó imágenes de CDN decapitando a sus rivales en sus redes sociales. El Manchas estaba acompañado por otro miembro del CDN con el alias “El Wicho” cuando fue asesinado por los militares.

Además, el hijo de Carlos Domínguez Rodríguez -periodista asesinado en Nuevo Laredo mientras cubría la corrupción local- ha denunciado reiteradamente que Raymundo Ramos está involucrado en el crimen organizado y recibe dinero de narcotraficantes.

Ramos, a su vez, alegó que el hijo trabajaba con la Fiscalía General de Justicia de Tamaulipas.

Según Nación 14 , el FBI y la DEA de EE. UU. presentaron un informe en 2020 que recopiló evidencia de su investigación sobre la cooperación de Raymundo Ramos con CDN que llevó al gobierno de EE. UU. a cancelar su visa estadounidense .

Ese mismo año se difundió una grabación de audio que supuestamente muestra a Raymundo Ramos pasando información sobre una investigación federal a un jefe de plaza del CDN llamado Jorge Ezequiel Gutiérrez Pimentel, alias “El Borrado”.

Varias publicaciones en español como El País y El Sol , así como publicaciones internacionales como Reuters , han optado por publicar citas de Raymundo Ramos Vázquez sin descargo de responsabilidad que reconocen las acusaciones de su connivencia con el crimen organizado, fundamentadas por una investigación del FBI y la DEA.

Fuentes: Carta NLHRW , Reforma , López Doriga , La Voz del Pueblo , Telemundo , Reuters , El País , El Sol de Tampico , Animal Político , El Universal , Nación 14,Los Ángeles Press, Comunicado SEDENA , La Jornada , El Siglo de Durango , Excelsior , El Heraldo , Zeta Tijuana , CÓDIGO MX

 

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