• Los detenidos operaban en Baja California y Guerrero, exigiendo hasta 19 mil dólares por cruzar migrantes sudamericanos a Estados Unidos, gracias a una operación de inteligencia conjunta entre México, Brasil y EE.UU

 

 

Redacción/CAMBIO 22

Ciudad de México. Un juez federal vinculó a proceso a cinco personas que presuntamente integraban una organización de tráfico de personas que fue desmantelada y operaba en Baja California y Guerrero, México, para cruzar de manera irregular a migrantes a Estados Unidos, en su mayoría sudamericanos, a quienes exigían el pago de aproximadamente 19 mil dólares por cada cruce. Fuentes del gabinete de seguridad informaron que las personas procesadas son Ubaldo Genchi Atrizco, Nohe Gómez Hernández, María Raquel Cárdenas Kennedy, alias La Tía, Dalia Genchi Atrizco y José Antonio Valenzuela Franco, quienes fueron detenidas en días recientes por trabajos de inteligencia entre los gobiernos de Estados Unidos, Brasil y México.

En tanto, la Fiscalía General de la República (FGR) -autoridad que a través a través de la Fiscalía Especializada en materia de Delincuencia Organizada (FEMDO) obtuvo la vinculación a proceso de dichas personas-, señaló que el delito que se les imputa es por delincuencia organizada con la finalidad de cometer tráfico de personas. “De acuerdo con la indagatoria, los ahora vinculados presuntamente forman parte de una organización criminal dedicada al tráfico de personas hacia los Estados Unidos, en su mayoría provenientes de Sudamérica; operaban en Ensenada, Mexicali, Tecate y Tijuana, principalmente”, señaló la FGR.

El juez federal decretó en dicha vinculación la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa y tres meses para la investigación complementaria. Fuentes de seguridad federales señalaron que dicha organización operaba al menos desde 2021 y se calcula que en promedio cruzaban a EU a 80 personas mensualmente, obteniendo ganancias de más de un millón y medio de dólares durante dicho periodo. Además de Baja California, dichas personas también operaban desde Piedra Imán, Guerrero.

Tres de los procesados tenían funciones de dirección en la estructura delictiva y dos eran subordinadas, dedicándose al traslado y alojamiento de personas indocumentadas y otras actividades de transacciones financieras. Ubaldo Genchi presuntamente fungía desde 2021 como coordinador de su propia célula criminal y, entre otras funciones, fijaba el precio de cada cruce ilegal; sus zonas de operación eran Tijuana y Piedra Imán.

Nohe Gómez, esposo de Dalia Genchi, se encargaba desde Tijuana de coordinar y supervisar el cruce ilegal de migrantes a territorio estadunidense y los albergaba en su casa; de igual forma, María Raquel Cárdenas tenía funciones de dirección y era la responsable de internar a estas personas por la vía marítima y terrestre, principalmente desde Ensenada.

 

Fuente: La Jornada

redaccion@diariocambio22.mx

HOC/AGF

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