CAPA Desperdicia Miles de Litros de Agua en Chetumal sin dar Respuesta
22 May. 2025
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Lo ocurrido con una fuga no es un hecho aislado, es una muestra de la fragilidad operativa de CAPA en Chetumal
Ricardo Jesús Rivas/ CAMBIO 22
CHETUMAL, 22 de mayo. – Una fuga masiva de agua potable se mantuvo durante toda la madrugada de este jueves en la estación de distribución de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA), ubicada en la avenida Magisterial con 3 Garantías, en la capital del estado. De acuerdo con vecinos del lugar, desde las 11 de la noche se reportó el derrame, pero durante horas no hubo atención por parte de la paraestatal, lo que generó molestia e indignación entre los habitantes del sector.
Lo ocurrido no es un hecho aislado, es una muestra de la fragilidad operativa de CAPA en Chetumal, donde en los últimos meses se han acumulado denuncias por fugas, cortes prolongados, baja presión y deficiencias en el servicio. Sin embargo, lo que más inquieta a los ciudadanos es el doble discurso, mientras se les pide cuidar el agua por la sequía y el estrés hídrico, las propias instalaciones del gobierno permiten que miles de litros se pierdan sin control y sin reacción inmediata.

La negligencia se vuelve más grave al considerar que se trató de una estación oficial de distribución, es decir, un punto crítico de operación donde el monitoreo y mantenimiento deberían ser constantes. No fue una tubería rota por terceros, sino una falla interna ignorada por horas, pese a que vecinos aseguraron haber llamado repetidamente a los teléfonos de emergencia de CAPA sin obtener respuesta alguna. La imagen que se proyecta es la de una institución desbordada o indiferente ante su responsabilidad más elemental.
Lo anterior, podría parecer menor, sin embargo, cobra otra dimensión en una ciudad que enfrenta rezagos históricos en infraestructura hídrica y donde la población aprendió a vivir con tandeos, tinacos y resignación.
Más allá del desperdicio material, lo que se escapa también es la confianza en una institución que debería garantizar el acceso y el cuidado de un recurso esencial. La omisión de CAPA anoche empapó las calles, pero también puso en evidencia la sequía de atención institucional y el grave daño que dicha institución tiene internamente.
LRE




















