Redacción / CAMBIO 22

José María Morelos, 25 de agosto.- A pesar de que el cultivo de jamaica se presenta como una opción rentable y viable en muchos ejidos de José María Morelos, los campesinos locales siguen siendo reticentes a incursionar en la producción de esta flor, que cuenta con múltiples aplicaciones en las industrias alimentaria y farmacéutica.

La flor de jamaica podría prosperar en las zonas de cultivo intensivo de JMM, pero muchos campesinos continúan dedicándose a las actividades agrícolas tradicionales, como el maíz, la calabaza y la pepita pequeña. Freddy Argüello, comisario ejidal de Othón P. Blanco, resaltó que una de las mayores ventajas del cultivo de jamaica es que no requiere tanta atención ni insumos comparado con otros cultivos. A pesar de esto, la preferencia por las cosechas convencionales se mantiene firme entre los productores locales.

Argüello, quien ha cultivado jamaica en su parcela, compartió su experiencia y subrayó que, aunque la flor disminuye considerablemente de peso al secarse, el precio que alcanza en el mercado —hasta 250 pesos por kilo— la convierte en una opción atractiva. No obstante, señaló que este dato no ha sido suficiente para motivar a más campesinos a diversificar sus cultivos.

Por el momento, muchos labriegos en las áreas mecanizadas han optado por cultivar jamaica en pequeñas superficies, destinando la mayor parte de la producción para el consumo propio y dejando pasar una oportunidad potencialmente lucrativa para el mercado local y regional. La falta de adopción masiva de este cultivo se debe, en parte, a la incertidumbre y el apego a las prácticas agrícolas tradicionales, que han sido la base de la economía rural en la región por generaciones.

 

 

 

redaccionqroo@cambio22.mx

LRE

WhatsApp Telegram
Telegram