Cae Presunto Estafador por Fraude Inmobiliario en Cancún; Usurpó Identidad y Vendió Casa Ajena

Redacción / CAMBIO22

Cancún, 4 de agosto. — La Fiscalía General del Estado (FGE) de Quintana Roo detuvo a un joven de 21 años, identificado como Daniel “N” y/o Julio “N”, de nacionalidad libanesa y naturalizado mexicano, acusado de fraude y uso de documento falso, tras vender un inmueble que no era de su propiedad.

De acuerdo con la FGE, los hechos ocurrieron el pasado 10 de febrero, cuando el ahora detenido firmó un contrato privado de compra-venta con la víctima en una notaría pública, para la adquisición de una vivienda ubicada en la Supermanzana 332 del municipio de Benito Juárez.

El comprador entregó un millón 600 mil pesos como pago por el inmueble y tras el acuerdo, acudió con el vendedor a una segunda notaría para certificar el documento, donde recibió una llave que supuestamente correspondía a la propiedad adquirida.

Sin embargo, al acudir al fraccionamiento para tomar posesión del inmueble, el supuesto vendedor nunca llegó ni volvió a responder las llamadas.

La denuncia fue presentada ante la Fiscalía, que inició una investigación y descubrió que Daniel “N” usurpó la identidad de Julio “N”, presentándose como gestor inmobiliario.

Además, una segunda persona, aún no identificada, se hizo pasar por el verdadero propietario de la casa durante la transacción.

El Registro Público de la Propiedad confirmó posteriormente que el inmueble pertenece a una persona que no reside en Cancún, quien al ser localizado por las autoridades declaró no conocer al detenido, ni haber autorizado ninguna venta.

Ante ello, también presentó una denuncia por usurpación de identidad.

Tras reunir los elementos de prueba, un juez de control giró una orden de aprehensión, la cual fue cumplimentada por agentes de la FGE.

El detenido quedó a disposición del Ministerio Público, en espera de que se defina su situación jurídica.

Además, la Fiscalía informó que Daniel “N” está relacionado con al menos tres carpetas de investigación más por el mismo modus operandi, con un daño patrimonial acumulado que asciende a aproximadamente 4 millones 370 mil pesos.

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