• El Mensaje de Hoy y de esta Cuaresma es Acercarse al Hermano, Reconciliarse con el Hermano y Ayudar al Hermano Más Pobre, Más Lastimado, Más Vulnerado, Más Vulnerable, Señaló Monseñor Pedro Pablo Elizondo.

 

Gabriel Alcocer/CAMBIO 22

Cancún, Q. Roo, 11 de febrero. – Amar a nuestro prójimo fue el mensaje que lanzó el obispo Pedro Pablo Elizondo, después de la misa dominical en la Catedral de Cancún, a unos días del inicio de la cuaresma y enfatizó en brindar una atención especial a quién lo necesite en este domingo que la iglesia católica celebra la Jornada Mundial del Enfermo.

“El mensaje de hoy y de esta cuaresma es el poder acercarse al hermano, reconciliarse con el hermano y ayudar al hermano más pobre, más lastimado, más vulnerado, más vulnerable. Jesucristo se dedicó a cuidar a los enfermos, ayudar a todos en lo que necesitaban. Nosotros, la mejor manera de honrar y amar a Dios es amar a nuestro prójimo y hay mucho prójimo que está lastimado, entonces Jesucristo nos dice: Tuve hambre y me diste de comer, estaba triste y me consolaste, estaba solo y fuiste a verme, estaba enfermo y me visitaste, ese es el mensaje ir a visitar”, expresó.

El obispo pidió hacer una reflexión a las personas en cuánto tiempo ha pasado sin que visiten a un enfermo o en la falta de ayuda hacia alguien que pide limosna. Dijo que la ayuda debe de brindarse a quiénes tengamos cerca, incluso a los propios integrantes de la familia.

Pedro Pablo Elizondo, monseñor de la Diócesis Cancún-Chetumal mencionó que hay que atender al más necesitado, con mucho amor y compasión, con amor práctico en necesidades concretas, no por Internet.

“No amor digital, sino amor presencial, porque necesitan un abrazo, un apapacho, un beso y estar con ellos, el enfermito, el ancianito, el discapacitado, el que no tiene a nadie, el que está solo, el que está enfermito, hoy es la jornada mundial del enfermo y hay que atender a todos los que están enfermitos y necesitan, que es lo más que necesita un enfermo, la cercanía, la compañía, la atención, estar con él, no hace falta que le eches mucho rollo y menos un rollo mareador, porque se va a enfermar más, sino que estés con él, cerca de él, ese es el mensaje, estar cerca del enfermo”, agregó.

Sobre la celebración del Carnaval, mencionó que Dios quiere que seamos felices, pero sanamente y no echar a perder nuestras vidas, sin caer en las adicciones, lo que se convierte en una esclavitud, principalmente para los jóvenes.

Por último, el obispo dijo que el mensaje de la Cuaresma es hacer oración, penitencia y caridad, así como evitar tentaciones y malos hábitos.

 

redaccionqroo@diariocambio22.mx

RHM

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