Miguel Ángel Fernández/ CAMBIO 22 

BACALAR, 10 de febrero.- Ante la presencia del pez diablo en la Laguna de los Siete Colores, el Ayuntamiento de Bacalar analiza la implementación de estrategias para controlar esta especie invasora, entre ellas la realización de un torneo de pesca, informó el presidente municipal, José Alfredo Contreras Méndez.

El pez diablo (Pterygoplichthys), también conocido como pleco o bagre armado, es una especie exótica que ha invadido diversos cuerpos de agua en México, generando afectaciones en los ecosistemas acuáticos. Su capacidad para reproducirse rápidamente y su ausencia de depredadores naturales han hecho que se convierta en una amenaza para la biodiversidad de la laguna.

Torneo de pesca: una estrategia para el control de la especie

Ante esta problemática, el Ayuntamiento de Bacalar planea organizar un torneo de pesca con el objetivo de incentivar la captura del pez diablo y reducir su población en la laguna.

“Esta especie está causando un impacto negativo en el ecosistema, por lo que buscamos estrategias efectivas para controlar su presencia. Un torneo de pesca nos permitirá involucrar a la comunidad en este esfuerzo de erradicación”, señaló Contreras Méndez.

Un problema ambiental en expansión

El pez diablo se alimenta del sustrato y altera los sedimentos, afectando la calidad del agua y desplazando a especies nativas. Además, su rápida reproducción dificulta su control sin una estrategia de manejo adecuada.

Diversas comunidades en México han recurrido a torneos de pesca y programas de aprovechamiento para mitigar su impacto. En algunos casos, se ha promovido el uso del pez diablo como insumo en la producción de harina de pescado o en la gastronomía local.

Llamado a la comunidad y prestadores de servicios

El Ayuntamiento de Bacalar busca que pescadores, prestadores de servicios turísticos y ciudadanos se sumen a esta iniciativa. Además, se plantea trabajar en coordinación con instituciones ambientales y académicas para generar soluciones sostenibles.

La Laguna de los Siete Colores es uno de los ecosistemas más importantes de Quintana Roo y un atractivo turístico de alto valor. Su conservación es clave para el desarrollo de Bacalar, por lo que la erradicación del pez diablo se ha convertido en una prioridad ambiental.

El torneo de pesca podría marcar el inicio de un esfuerzo coordinado para contener esta amenaza y garantizar la preservación de la laguna para las futuras generaciones.

 

 

redaccionqroo@diariocambio22.mx

RHM

 

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