Ante el Calor Extremo que Prevalece en Yucatán, el Servicio de Electricidad Sufre Colapsos por la tanta Demanda del Suministro
13 May. 2024
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Dos Nuevas Plantas de Electricidad se Encuentran en Construcción en Mérida y Valladolid.
Carlos Navarrete Quintal / CAMBIO 22
Mérida, Yuc. a 13 de mayo.- Para aminorar los colapsos eléctricos hay que tomar precauciones con la electricidad. Entre ellas está el ahorro de energía en cada hogar, negocio, industria u oficina pública, mientras llega la solución definitiva con la entrada en funcionamiento de las dos nuevas plantas de generación de electricidad de ciclo combinado que se construyen en Mérida y Valladolid.
Para evitar un colapso del sistema estatal, regional y nacional se hacen los cortes de luz programados o los molestos apagones que ocurren en automático.
Hay soluciones y alternativas que aminoren el déficit eléctrico. Primero, promover la conciencia energética en el uso de energía con una buena campaña de concienciación ciudadana. Son medidas que todos deben aplicar, como el uso de focos y lámparas leed en oficinas de gobierno, viviendas y negocios, lo que reduciría el consumo porque genera un ahorro de 70% a 80% en comparación con los focos fluorescentes.
Otra medida aplicable es darle buen uso a los aires acondicionados con una temperatura de 23 a 26 grados, que generan confort en el espacio. Si bajas esta temperatura recomendable, el consumo de energía aumenta un 8% en cada grado.
El buen uso del refrigerador también es un factor de ahorro. No se debe obstruir la ventanilla que produce el aire frío ni abrir la puerta totalmente en forma prolongada porque la pérdida de la heladez ocasiona que el refrigerador inicie un nuevo ciclo de enfriamiento.
Por lo que hay alta demanda de energía para mitigar este fenómeno climático, lo que rebasa la producción de energía eléctrica en esta región de México.
Los 40 días de extremo calor; más incendios es inevitable que surjan constantes apagones y cortes del suministro de electricidad en las ciudades para evitar algún colapso mayor que cause incontrolable molestia social y empresarial.
“Las olas de calor que sentimos son derivadas del cambio climático que hay en el planeta por la contaminación y otras acciones negativas del hombre en la tierra”, explican los expertos en energía.
Las altas temperaturas provocan que se intensifique el calor, que las personas usen más los equipos de aires acondicionados y los ventiladores, lo que provoca un mayor consumo energético que estresa las líneas eléctricas de la red de la CFE.
El problema del déficit energético llegará a su fin en enero de 2025, cuando entren en operación las dos nuevas plantas de generación de electricidad que están en construcción en Mérida y Valladolid.
“La producción de casi 1,500 mega watts (MW) de energía con estas dos plantas debe cubrir de manera suficiente la demanda actual y hasta habrá un excedente”, señalaron los expertos de la energía eléctrica en la zona peninsular.
“Esta producción adicional de electricidad debe cubrir la demanda de los próximos 15 a 20 años, aún si la entidad sigue con su crecimiento poblacional, comercial, industrial y habitacional”, afirmaron.
Datos actualizados del Cenace señalan que el país tiene una demanda bruta actual de 46,326 MW y para el día 10 de mayo pasado, a las 14:36 horas, la demanda actual neta fue de 44,998 MW. Incluso, se espera una demanda máxima pronosticada de 47,377 MW ante la ola de calor que azota al territorio nacional.
En el caso particular de la región peninsular, hay una generación neta de alrededor de 2,231 MW con un intercambio neto de 213 MW entre la región peninsular y la región Oriental para cubrir la demanda neta de 2,231 MW.
En estos momentos se construyen dos plantas generadoras de energía: la planta Mérida IV con capacidad de 499 MW y la planta Valladolid, que producirá más de 1,000 MW.
Estas dos plantas de ciclo combinado ayudarán a cubrir la demanda actual, aumentará el escalón entre la generación y la demanda y habrá más maniobrabilidad para erradicar los problemas que produce el déficit energético.
Yucatán será autosuficiente en electricidad y podría tener un refuerzo adicional, como son la reactivación de una veintena de proyectos para la construcción de granjas eólicas y solares.
Lo ideal en el Sistema Eléctrico Nacional es que tenga límite mayor de reserva al 6% que permita tener un mayor margen de maniobra energética para cubrir la demanda neta de consumo debido a las olas de calor.
Este desbalance hace que el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) realice cortes programados en ciertas zonas para desestresar las líneas eléctricas y evitar un daño mayor a la red y transformadores.
Sin estos cortes de luz, los resultados serían más costosos que los apagones porque dañarían líneas, transformadores y otra infraestructura, lo que haría más costosas y tardada la reparación, y eso causaría mayor molestia entre los usuarios.
Se le planteó que los usuarios tienen terror al uso del aire acondicionado porque eleva el costo de la facturación. Explicó que un equipo de clima artificial consume 1.2 kilowatt por hora si es de 12,000 BTU (una tonelada de refrigeración). Mientras más horas se utilice o más equipos tengan una vivienda o negocio, el costo es mayor. Pero aquí entra en juego la eficiencia del manejo como tener los equipos a una temperatura de 23 a 26 grados, suficiente para tener confort.
Quienes tienen mayor impacto en el costo son los sectores de la industria y el comercio porque tienen un esquema tarifario diferente al del hogar. Esos sectores productivos manejan el esquema de gran demanda-media tensión-horario que depende de la hora que utilices la corriente.
Para disminuir el consumo de electricidad y el pago, decenas de tienditas de la esquina, negocios y viviendas instalan paneles solares para la generación de energía propia. Poco a poco, la tecnología fotovoltaica ha ido disminuyendo el costo de un panel solar, lo que hace atractiva esta tecnología porque sí disminuye el pago de electricidad a la CFE.
Incluso, es recomendable para poblaciones donde el límite del esquema tarifario es de apenas 400 kilowatts por vivienda, como en el puerto de Progreso. Si el usuario supera ese consumo energético, que es inevitable por el uso de equipos de aire acondicionado, la tarifa se eleva al triple. El uso de paneles solares es una buena inversión en este tipo de poblaciones porque los paneles solares tienen una vida útil de 20 a 30 años y sí disminuye la facturación.
Además, hay programas oficiales para la compra de paneles solares por el ahorro de electricidad de la red eléctrica convencional.
“Los equipos industriales de aire acondicionado son los que generan mayor costo, como los edificios, negocios, plazas comerciales porque de cierto modo aumentan el consumo energético y eso depende del esquema tarifario.
En Mérida las tarifas son 1-C y 1-D, donde los topes son de 800 kwh para la primera, y de 1,000 kwh para la segunda. En el puerto de Progreso es 1-B, cuyo tipo máximo es de 400 kwh. Son 600 kwh menos en comparación con Mérida, eso tiene que ver con la temperatura de verano. Y cuando rebasas esa tarifa límite, pasas al esquema de alto consumo y el precio de la electricidad se triplica o cuadruplica.
“Sí es bastante perjudicial que el usuario tenga un consumo excesivo”.
Generalmente las viviendas actuales están preparadas para soportar estas cargas eléctricas, pero las casas antiguas sí requieren una inspección y adaptación. Incluso, las viviendas que usan paneles solares deben realizar una adaptación en sus instalaciones para el conteo de la electricidad que se produce, consume o el excedente que manda a la red eléctrica.
Los apagones programados generan molestia social, así como a los sectores turísticos, industriales y comerciales.
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