Alarma el Creciente Consumo de Drogas Entre Adolecentes en Quintana Roo
29 Dic. 2024
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Cancún lidera la lista, seguido por Playa del Carmen y Tulum, con un alarmante aumento en el uso de sustancias ilegales y sintéticas entre jóvenes de 12 a 19 años
Miguel Avendaño / CAMBIO 22
CANCÚN, 29 de diciembre-. En México, el consumo de drogas se ha incrementado exponencialmente entre adolescentes, quienes suelen experimentar con marihuana, pero luego prueban sustancias más fuertes como anfetaminas o cocaína colocando a Quintana Roo como uno de los 10 estados del país con más uso de drogas ilegales entre jóvenes de 12 a 19 años.
La numeralia sobre el tema indican que Cancún encabeza la lista de mayor consumo de drogas entre niños y adolescentes, seguido por Playa del Carmen y Tulum; los estudios también refieren que el incremento se debe al número poblacional, pero también hay altos consumos en Cozumel, Chetumal y Bacalar y a últimas fechas Tulum se coloca como la ciudad donde los niños y jóvenes consumen todo tipo de drogas y sobre todo sintéticas.
Este flagelo social se ve reflejado en los operativos contra narcomenudistas y el crecimiento de centros de rehabilitación en el estado; en ambos casos Cancún y Playa del Carmen encabezan la lista. Playa del Carmen es la ciudad de Quintana Roo donde se realizan la mayor detención de narcomenudistas, pero los golpes policiacos sobre este tema se presentan más en Cancún.

El pasado 7 agosto, la Fiscalía General del Estado de Quintana Roo (FGE) informó sobre el rescate de 11 hombres que eran víctimas de abuso en una clínica de rehabilitación en Chetumal. Entre las personas rescatadas se encontraban tres menores de edad. Mediante un comunicado, las autoridades del estado informan que un interno escapó de la clínica en Chetumal. Una vez en libertad denunció que sus compañeros estaban retenidos en ese lugar contra su voluntad, además de que constantemente sufrían maltrato.
También en Chetumal, tras reporte de un feminicidio, rescataron a una docena de jóvenes mujeres de un centro de rehabilitación en la calle Palermo donde una mujer había fallecido y presentaba posibles signos de violencia, por lo que se inició una carpeta de investigación; muchas eran menores de edad pero no se especificaron edades.

Ambos casos, reflejan el problema de la drogadicción de jóvenes en Quintana Roo a esto hay que sumarle los últimos operativos contra el narcomenudeo como el del 02 de noviembre pasado que fueron noticia nacional cuando la Fiscalía General del Estado y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), cumplimentaron cinco órdenes de cateo, giradas por jueces de control, en diversos puntos de Cancún, donde aseguraron diversas dosis de presuntos estupefacientes; además, lograron la detención, en los alrededores de los inmuebles, de cinco hombre y una mujer, por su posible relación en hechos constitutivos de delitos contra la salud en su modalidad de narcomenudeo.
La primera diligencia tuvo lugar en un domicilio ubicado en la calle Margaritas del fraccionamiento Villas Otoch Paraíso de la Supermanzana, donde los elementos participantes aseguraron bolsitas que contenían hierba color verde similar a la marihuana y fragmentos sólidos de material cristalino, parecido al cristal, una de las colonias de mayor consumo de drogas entre niños y jóvenes.
Las acciones continuaron en un inmueble localizado en avenida Chetumal, entre Río Hondo y Paseo de la Higuera donde encontraron vegetal verde y seco, así como sustancia color blanco con características de la cocaína. Otro más en la avenida Tulipán y calle Kanloi del fraccionamiento Prado Norte de la, ahí aseguraron hierba seca de color verde y sustancia sólida cristalina. En el fraccionamiento Las Palmas aseguraron hierba seca de color verde y sustancia de material blanquecino, así como cartuchos útiles y la detención de 10 presuntos narcomenudistas.

Con este panorama ‘normal’ de alta venta de drogas de todo tipo en las principales ciudades de Quintana Roo, también se ha normalizado el consumo principalmente entre niños y adolescentes, por lo que Quintana Roo se mantiene sobre la media nacional en adicciones, donde los jóvenes inician desde los 12 o 13 años de edad, asegura el Comisionado Estatal Contra las Adicciones, Francisco Boneta, quien reconoció que en Tulum el tema es alarmante por el alto consumo. Dijo que a pesar de que los jóvenes desconocen realmente lo que es el fentanilo, eso no significa que no lo consuman, lo que es doblemente grave.
Explicó que las encuestas se realizaron en los municipios de Othón P. Blanco, Tulum, Solidaridad y Benito Juárez, con tamizajes de casi dos horas. Se explicó que Quintana Roo cerró prácticamente igual en el tema de adicciones, por arriba de la media nacional.

Por otra parte, jóvenes de entre 16 a 27 años de edad son los principales consumidores de la droga cristal en Cancún, según información del Instituto Municipal contra las Adicciones (Imca), en el 2023 se registraron a 33 personas atendidas por consumo de la droga cristal en Benito Juárez, de las que seis eran menores de edad de entre 16 y 17 años; otros nueve estaban entre los 18 y los 22 años, y seis más de los 23 a 27 años. El resto fueron personas de 28 a 44 años de edad.
Francisco Boneta explicó que el factor más común que detona el consumo en jóvenes son experiencias dolorosas que nunca fueron atendidas. De modo que en las sustancias los jóvenes buscan una salida al dolor emocional; el IMCA es uno de los que brindan primera atención a los actuales consumidores de cristal.

Pero según información de la Conasama, cuando se reciben casos de personas adictas al cristal, son canalizados con instancias de salud facultadas para tratar estas situaciones, como los Centros de Integración Juvenil en Quintana Roo (CIJ), o el Centro Comunitario de Salud Mental y Adicciones (Uneme-Cecosama). Todos los centros de atención deben estar acreditados por la Conasama o por organismos estatales, lo que comprueba que son sitios que cumplen todas las normas de dar este servicio médico. Asimismo, las estrategias contra las drogas en la escuela, y la concienciación en los hogares son líneas a seguir para disminuir esta incidencia, sin embargo es una tendencia a la baja.
Durante una medición que se realizó en 16 mil estudiantes de educación media y superior del municipio de Benito Juárez por parte del Instituto Municipal contra las Adicciones (IMCA), de manera preliminar se constató que la marihuana es la primera droga de inicio que se normaliza entre las nuevas generaciones, además del uso a través de los llamados vapeadores.

Oscar Guzmán, director de dicho instituto, dice que la normalización del consumo de marihuana sigue siendo la llamada droga de inicio entre los jóvenes a través de vapeadores que hacen que sea mucho más fácil el consumo, además de que drogas como el cristal también están siendo utilizadas por los estudiantes desde edades tempranas en el municipio.
En otro estudio, Quintana Roo es uno de los 10 estados del país con más uso de drogas ilegales entre jóvenes de 12 a 19 años, de acuerdo con la asociación civil México Unido Contra la Delincuencia (MUCD).

La mariguana se mantiene como la sustancia de mayor consumo, seguida de las metanfetaminas, cocaína e inhalantes, aunque también existe una tendencia en alcohol y tabaco, explicó Israel Álvarez, coordinador del proyecto “Conocer para Transformar” de MUCD.
A partir de 2019, esta organización -que coadyuva en la solución de problemas de inseguridad, violencia e impunidad- inició un proyecto con miras a extenderlo por cuatro años para identificar factores de riesgo en el consumo de drogas legales e ilegales.
Quintana Roo, Aguascalientes, Ciudad de México, Coahuila, Durango, Guanajuato, Morelos, Oaxaca y Yucatán fueron seleccionadas para el estudio por ser las entidades con incidencia en el consumo de sustancias.
Al menos el 10 por ciento de los estudiantes de secundaria había consumido droga al menos una vez en su vida; las más populares: inhalables, mariguana y drogas médicas (tranquilizantes y anfetaminas).
Mientras que el porcentaje entre el alumnado de secundaria fue del 22 por ciento, según datos de la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas en Estudiantes (ENCODE); sin embargo, la incidencia fue mayor respecto alcohol y tabaco con 76 y 51 por ciento, respectivamente.
Por su parte, la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco (ENCODAT) revela que aproximadamente 4 por ciento de adolescentes de 12 a 17 años (12.9 mil personas) tomaban bebidas embriagantes diario, superando así la media nacional del 2.6 por ciento.

El 6.4 por ciento (20.7 mil jóvenes) dijeron que habían fumado más de 100 cigarros en toda su vida; es decir, el consumo ya había pasado la fase experimental. La marihuana se mantiene como la sustancia ilegal de mayor consumo; después las metanfetaminas y luego la cocaína.
Un estudio internacional revela que el consumo de metanfetaminas se ha convertido en un problema de salud pública, esto se debe principalmente al crecimiento exponencial que ha tenido en los últimos años. Entre el 2017 y 2022 creció en 218% y los jóvenes son los principales consumidores; el pico está en la población de 15 años, justamente durante la adolescencia, por lo que ha sido considerado el principal problema de atención de la población recomendado por Naciones Unidas y la Organización Mundial de la Salud.
Durante la mesa de análisis “La crisis actual del consumo de metanfetamina “cristal”, María Elena Medina-Mora, organizadora del encuentro y miembro de El Colegio Nacional, dijo que “en 2018 se hizo popular el cristal inyectado y se convirtió en la principal droga de abuso durante la pandemia”.

En 2023, el Seminario de Estudios Sobre la Globalidad, de la UNAM, en su número especial de opioides, dio a conocer que en México el consumo de sustancias se ha concentrado principalmente en los estados de la frontera norte con Estados Unidos, donde también se enfrenta un nuevo reto de salud pública, derivado de la llegada del fentanilo y de su rápida extensión en esta región. La población que más se ha visto afectada son migrantes, personas sin hogar, poblaciones de la diversidad sexual, mujeres y jóvenes.
Clara Fleiz, investigadora en ciencias médicas, explicó que los consumidores de estimulantes como la metanfetamina que llegan a los centros de rehabilitación, particularmente en la frontera norte de México, son en su mayoría hombres, con un porcentaje de seis de cada diez personas, y cuatro de cada diez son mujeres. “Un 20% de la población que llega a la rehabilitación vivía en un contexto de calle, en estos picaderos o fumaderos y se consideran sobrevivientes”.

Agregó que la primera forma de consumo de estos estimulantes es fumada; la segunda, es inhalada; y la tercera es inyectada. Y los afectados pueden consumir hasta 11 veces al día. “En la zona fronteriza, los hombres llegan a mezclar la sustancia con alcohol y fentanilo, mientras que las mujeres la combinan principalmente con benzodiacepina (que actúa sobre el sistema nervioso central)”.
Actualmente, la evidencia demuestra que más del 60% de la heroína que circula en estas ciudades fronterizas contiene fentanilo. Los hallazgos son contundentes: La población está siendo expuesta al fentanilo sin saberlo. Este opioide se encontró mezclado en sus dosis habituales, esto explica el aumento de la sobredosis. “Tenemos un fenómeno que ha tenido una larga historia y que actualmente es un problema grave en México, y en otros países”, confirma Medina-Mora.

El Covid-19 agravó esta situación. “Los adolescentes entre 15 y 16 años y los adultos jóvenes entre los 18 y 24, han aumentado el consumo de drogas en un 15% de opiáceos, 20% en marihuana y 14% en alcohol. De tal suerte que siete de cada diez adolescentes han pasado por situaciones de depresión y 62% con problemas de ansiedad”.
“No sólo han aumentado el consumo y los problemas de salud mental, también lo hizo la violencia, los abusos y demás acciones, que van contra la integridad de las personas. El 43% de los adolescentes vivieron algún tipo de violencia en sus casas de tipo psicológica, física o sexual. Esto nos habla de cómo se ha ido agravando los problemas emocionales del país”.

De acuerdo con el Informe Mundial sobre Drogas 2023, el consumo de sustancias psicoactivas sigue siendo elevado en todo el mundo. En 2021, 1 de cada 17 personas de 15 a 64 años había consumido una droga en el último año. La cannabis sigue siendo la droga más consumida; según las estimaciones, 219 millones de personas (4.3% de la población mundial adulta) la consumieron. El consumo de esa droga va a la alza y, si bien la mayoría de las personas que la consumen en todo el mundo son hombres (alrededor del 70%), la brecha de género se está reduciendo en algunas subregiones; en América del Norte el 42% de las personas que consumen cannabis son mujeres.
En México, el consumo de sustancias entre las personas que demandaron tratamiento se está dando a edades tempranas, así lo revela la organización Centros de Integración Juvenil A.C. Datos reportados por el Sistema de Información Epidemiológica del Consumo de Drogas (SIECD) señalan que durante el segundo semestre de 2023 se registraron 14,420 consumidores de sustancias psicoactivas solicitantes de primer ingreso a tratamiento, de los cuales 9,584 había consumido drogas ilícitas y 4,836 exclusivamente tabaco y/o alcohol. Cabe destacar que el inicio de uso de tabaco (15.1 años) y alcohol (14.9 años), en general se presenta antes que el inicio del consumo de drogas ilícitas (17.2 años).

La información también señala que el ingreso a tratamiento se da, en promedio a los 25.8 años. En el caso de las mujeres, 28.8% solicitó atención tanto por el consumo de sustancias como por otras condiciones de salud mental. Los principales motivos reportados fueron: el uso de drogas ilícitas (78.5%), de alcohol (24.1%), ansiedad (2.4%), depresión (23.5%) y el uso de tabaco (18.2%). En general, las metanfetaminas (34%) y la cannabis (29.3%) son las principales sustancias por las que se solicita tratamiento. En los últimos tres años el consumo de cannabis alguna vez en la vida ha presentado una disminución, al pasar de 84.6% en el primer semestre de 2020 a 79.4% en el segundo semestre de 2023. Mientras que el uso de metanfetaminas alguna vez en la vida ha aumentado significativamente en los últimos 10 años, al pasar de 14.8% en 2013 a 45.6% en 2023.
Asimismo, el consumo de fentanilo y análogos pasó de cinco casos en el primer semestre de 2021 a 103 casos en el segundo semestre de 2023. Las entidades donde se reportó fueron: Estado de México, Baja California, Ciudad de México, Chihuahua, Sonora, Nuevo León, Sinaloa, Guanajuato, Puebla, Coahuila, Guerrero, Jalisco, Morelos, Quintana Roo y Zacatecas.

La popularidad en el uso de drogas sintéticas en México y en el mundo está estrechamente relacionada a la facilidad y el bajo costo que supone producirlas en grandes cantidades en laboratorios clandestinos durante todo el año, mientras la mayoría de las drogas tradicionales, como la marihuana, dependen de plantaciones que necesitan un clima propicio para crecer, según explica un informe de la Administración de Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos y el reporte “Precursores químicos y el comercio de drogas sintéticas en México” elaborado por Insight Crime.
Se trata de un negocio complejo y multifacético operado por poderosos cárteles del narcotráfico, cuyo objetivo final es llegar a un importante número de consumidores, explica Nateras, quien sostiene que “no se puede entender ninguna economía local o global sin el dinero del negocio ilegal de las drogas”.
Tan solo en febrero de 2024, un operativo conjunto entre miembros de la Fiscalía General de la República y la Secretaría de Marina en México desbarataron un narcolaboratorio en Sonora, estado fronterizo con Estados Unidos, donde se encontraron más de 45 toneladas de precursores, sustancias químicas destinadas a la elaboración de drogas. Las autoridades calcularon su valor en unos US$ 700 millones, “cantidad que podría triplicarse según el país de destino”, indicó el gobernador de Sonora, Alfonso Durazo.

El país de destino podría ser no solo Estados Unidos, donde las drogas sintéticas son responsables de miles de muertes por sobredosis al año. El propio México está “experimentando un aumento dramático en el consumo de drogas sintéticas, principalmente metanfetamina, aunque también fentanilo”, según el reporte de Insight Crime.
Además, dice el profesor investigador de la UAM, hay que sumar a la ecuación el bajo precio de estas drogas y su accesibilidad. Por ejemplo, el cristal – una droga de tipo anfetamínico – costaba en 2022 casi US$ 6: “El día de hoy se puede comprar cristal metanfetamina en cualquier municipio del país. Cuesta menos de 100 pesos un gramo de cristal metanfetamina y está siendo consumido por todos los estratos sociales”, dijo Gady Zabicky Sirot, comisionado nacional contra las adicciones, al presentar los hallazgos del Observatorio Mexicano de Salud Mental y Adicciones en 2023.
Con información del Sistema de Noticias CAMBIO 22
HTR/AGF




















