Laura Beytia/CAMBIO 22

CHETUMAL, 18 de marzo.- El nuevo ajuste al precio del kilogramo de tortillas, que comenzó a aplicarse en los primeros días de este mes de marzo en la mayoría de los establecimientos de este giro en la capital del estado a consecuencia del aumento de la harina, que es un elemento indispensable para la elaboración de este alimento, ha ocasionado que las ventas disminuyan hasta un 30%.

Han sido los propietarios y encargados de las tortillerías, quienes han manifestado que al cobrar de 2 a 3 pesos de más, los consumidores están comprando menos producto, lo que afecta no solo su economía de sino también su producción, como externó Jaime Castillo propietario de uno de estos negocios en la colonia Ampliación Proterritorio.

“La inflación está incontenible y todo sigue subiendo, a nosotros nos pega mucho que los precios de la tonelada de harina aumenten cada vez más porque nos orilla a ajustar también nuestros precios y eso impacta en las ventas, porque la economía no está muy bien y algunas familias no pueden darse el lujo de gastar 3 pesos más, están comprando menos tortilla y al menos aquí en mi negocio las ventas han bajado en cerca de un 30%, esta difícil mantenernos pero seguimos trabajando porque de esto vivimos.”

Tan solo en la capital del estado se tiene el registro de 100 expendios de tortilla que siguen luchando contra el encarecimiento de los insumos para su producción y no sumarse a los 30 que bajaron cortinas durante la pandemia.

Pero esta situación no solo está generando afectaciones a los productores de la masa y la tortilla en la capital del estado, sino que de igual manera, quienes se dedican a la venta de comida padecen los efectos de los nuevos costos de este producto, que es un complemento importante en sus pedidos, como afirmó Isabel Hernández propietaria de una pequeña cocina económica ubicada sobre la avenida Javier Rojo Gómez.

“Claro que nos afecta, porque compramos 4 kilos de tortilla diarios entre semana y hasta 6 los sábados, entonces que le suban al precio nos desbalancea porque tenemos que sacar unos pesos más diariamente para eso y merma nuestros ingresos para hacer compras, para la luz, el agua, el pago del personal y aunque deberíamos también subir los precios de las órdenes de comida, tratamos de mantenerlos porque si subimos, nos arriesgamos a ya no vender lo que estamos vendiendo.”

Actualmente, el kilo de tortilla se encuentra entre 26 y 27 pesos, pero la Cámara Nacional de la Industria de la Masa y la Tortilla en Quintana Roo, no descarta que antes de finalizar el año pudiera alcanzar los 30 pesos, dado que aseguran, el gobierno federal no ha querido interceder ante los industriales harineros, para frenar sus elevados costos.

lau.beytia@diariocambio22.mx

 

JFCB

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