Laura Beytia/CAMBIO 22
CHETUMAL, 19 de enero.- La caída en las ventas que están registrando los socios de la Unión de Propietarios de Restaurantes, Bares y Similares (UPROBARS) está complicando su situación financiera para poder cubrir el pago de los impuestos estatales y así poder seguir operando.
El dirigente de esta agrupación Joaquín Noh Mayo, aseguró que ni siquiera con los descuentos que está brindando la SEFIPLAN logran reunir las cantidades que requieren para sus resellos, ya que además tienen que mantener la operatividad de los negocios, adquirir mercancía y hacer el pago de sus rentas y de su personal, lo que los deja en números rojos.
“Ya tuvimos reuniones con la SEFIPLAN donde le hicimos el planteamiento de que requeríamos mínimo el 85% de descuento en cada uno de los resellos o hasta el 75%, pero como siempre y lo digo con el debido respeto, optaron por danos únicamente el 65% para bares y restaurantes y el 50% para los minisúpers, pero sí está siendo muy complicado para muchos reunir estas cantidades y poder pagarlo antes del 31 de enero y tenemos que hacerlo en esa fecha porque a partir del 1 de febrero la UMA sube de precio a un 7% y la situación se complica y la autoridad no se pone en nuestros zapatos.”
Indicó que el pago del resello de los minisúpers asciende a 4 mil 800 pesos con el 50% de descuento, 6 mil 800 para los restaurantes aun con el 65% de descuento y 10 mil 006 pesos con el mismo descuento, pero en febrero estas cantidades se modifican con el ajuste en el precio de la UMA por lo que el panorama para este sector no es favorable.
Esto ha ido en aumento, ya que en el 2019 los minisúpers pagaron 3 mil 800 pesos, en el 2020 en 2 mil 500, en el 2021 con los efectos tan adversos que comenzaron a resentirse les brindaron mayores descuentos y ahora en el 2022 vuelven a elevar las cantidades cuando están en la famosa cuesta de enero, lo que es incomprensible.
Es por ello que comentó que sostendrán reuniones con los dirigentes del CCE, la CANACO Servytur y el de la CANIRAC, a fin de analizar la posibilidad de hacer un frente común y solicitar más descuentos para poder hacer sus pagos, ya que esta situación está orillando a muchos a traspasar sus negocios o vender sus patentes y optar por dedicarse a otro tipo de actividad que les genere mayores ingresos.
“Muchos restaurantes, minisúpers y bares los ven abiertos pero han cambiado de administración y de propietario porque la situación económica tan difícil impidió que pudieran seguir adelante y los que tenían estos negocios hoy son simples empleados o se han ido a los taxis o moto servicios y me da mucha pena ver como todo esto nos ha golpeado y más que la autoridad no nos brinde facilidades o nos apoye más para evitar cierres.”
Señaló que el efecto negativo de la pandemia se refleja en la disminución de su padrón de socios, ya que de 320 que tenían antes de la emergencia sanitaria, actualmente son solo 180 de los cuales aproximadamente un 5% ha adquirido préstamos para pagar los impuestos y otros más esperaran hasta el 31 para ver si lograron reunir lo suficiente.
RAM