Olivia Vázquez/CAMBIO 22

CANCUN, Q. ROO, 07 de diciembre.- La informalidad laboral en Cancún sigue ganando terreno a pesar de las grandes bolsas de trabajo que se ofrecen en el destino por la industria turística, lo que mantiene un déficit de mano de obra del 10 y hasta el 30% en algunos sectores productivos.

De acuerdo a la última información de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) en Quintana Roo otorgada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografia (INEGI), en Quintana Roo la población ocupada informal que corresponde a los ocupados o trabajadores que son vulnerables por la naturaleza de la unidad económica para la que trabajan, paso de 412 mil personas en el primer trimestre del 2021, a 429 mil personas en el tercer trimestre del 2022, es decir 17 mil personas más.

Este indicador revela el incremento que se ha venido dando en el sector laboral informal, donde se adhieren familias completas que encuentran una mejor remuneración en el comercio informal, que emplearse en alguno de los puestos de trabajo que se ofrecen en el destino.

Esta condición ya la venía reportando la misma alianza de Tianguistas de Cancún y otros comerciantes que reconocen que en la informalidad, se tiene un mejor ingreso para atender los gastos familiares.

Y es que en las bolsas de trabajo, aunque son miles de plazas las que se activan en el destino por la fuerte inversión que se sostiene en la región, el trabajador prefiere emplearse en muchas ocasiones en algun comercio informal o por su propia cuenta que entrar a un desarrollo hotelero o restaruantero y depender de sólo la propina, pues el salario es bajo y los tiempos de traslado al trabajo y toda la tramitología que se exige con la autoridad fiscal y la misma empresa, termina con la intensión de buscar un empleo informal.

Este indicador también lo ha dado la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) quien alerta que mientras el comercio formal en la micro y pequeña empresa presenta una alta mortandad en los primeros dos años de vida por la carga impositiva, la competencia de las grandes cadenas comerciales y el avance del comercio informal, cada vez se ven más puestos ambulantes en las calles y camellones los que se ven en Cancún, pero también hay un universo de micro y pequeñas empresas que han migrado a la informalidad para evitar pagar la carga impositiva.

En estos negocios, el trabajador sólo obtiene su salario pero no su prestación laboral y aunque a largo tiempo es un impacto para el trabajador, la remuneración es más alta que si se emplea en un establecimiento formal.

No obstante el censo del Inegi refiere que Quintana Roo sigue recuperando terreno en la generación de empleo y que en el tercer trimestre del 2022, las actividades terciarias (donde operan prestadores de servicios turísticos) concentraron a la mayor parte de la población ocupada con una participación del 80%, revelando que este sector activo 36 mil empleos más en comparación con el tercer trimestre del 2021, es una realidad que el empleo informal crece también por la alta movilidad poblacional y por la oferta salarial que se ofrece en el destino en el servicio terciario, donde la propina es el mejor aliciente del trabajador que ve en la calle o en el empleo informal, un ingreso más sólido para enfrentar los gastos familiares.

 

o.vazquez@diariocambio22.mx

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