Exregidor Denuncia Despilfarro y Falta de Transparencia en la Administración de Yensunni Martínez

• Francisco Ortega Lizarraga calificó el proceder como acto irresponsable, considerando que Chetumal es un municipio con recursos limitados

Ricardo Jesús Rivas/ CAMBIO 22

CHETUMAL, 30 de abril. – El exregidor Francisco Ortega Lizárraga arremetió contra la administración de la presidenta municipal de Othón P. Blanco, Yensunni Martínez, acusándola de un grave despilfarro de recursos públicos.

A través de un video difundido en sus redes sociales, Ortega Lizárraga señaló que casi 100 millones de pesos fueron mal manejados por la actual administración a través del Coplademun (Comité de Planeación para el Desarrollo Municipal), para obras cuestionables como el innecesario reemplazo de alumbrado público, señalética que nunca se colocó y la remodelación de su oficina en el Palacio Municipal. En su video, Ortega explicó que el 16 de abril, durante una sesión del Coplademun, se discutieron las obras a realizar en 2025, pero los antecedentes del 2023 fueron alarmantes.

Según el exregidor, 92 millones de pesos del Coplademun fueron destinados a una obra aparentemente innecesaria, el reemplazo de alumbrado público en 19 avenidas que ya contaban con iluminación, mientras que se desatendieron otras áreas de la ciudad que requieren urgentemente mejorar su infraestructura, como las del segundo cuadro de Chetumal.

Entre las avenidas mencionadas por Ortega están Camelias, Justo Sierra, Bacalar y José Siordia, las cuales aún carecen de un alumbrado adecuado, lo que refleja una grave falta de compromiso con las verdaderas necesidades de los ciudadanos.

Ortega calificó el proceder de Yensunni Martínez como un despilfarro irresponsable, considerando que Chetumal es un municipio con recursos limitados y que la prioridad debería ser mejorar las condiciones de vida de los habitantes, no gastarse el presupuesto en obras superficiales e innecesarias.

Además, criticó la decisión de la presidenta municipal de sustituir postes de concreto y acero galvanizado por postes más livianos y frágiles, que, según él, pueden ser fácilmente manipulados por dos personas de la tercera edad, lo que pone en evidencia la falta de calidad y durabilidad de las obras realizadas.

Otro de los puntos señalados por Ortega fue la redirección de 4 millones 748 mil pesos destinados originalmente para rehabilitar el deteriorado Palacio Municipal.

En lugar de atender la urgencia de mejorar las condiciones de la infraestructura municipal, estos recursos fueron utilizados para remodelar la oficina de la presidenta, lo que, en palabras de Ortega, refleja una actitud de frivolidad y vanidad que traiciona la confianza de los trabajadores municipales, quienes, según él, trabajan en condiciones precarias y peligrosas.

Finalmente, el exregidor acusó a la administración de Yensunni Martínez de desaparecer el presupuesto de un millón y medio de pesos que se había destinado para la instalación de señalética en la ciudad.

Ortega subrayó que, a pesar de las solicitudes y demandas de los regidores, no se ha explicado ni justificado el paradero de este dinero, lo que aumenta las sospechas de corrupción y mala gestión en la administración municipal.

Con estas acusaciones, Ortega Lizárraga plantea una serie de interrogantes sobre la verdadera prioridad de la actual administración, que parece estar más enfocada en obras simbólicas que en atender las necesidades reales de los ciudadanos de Othón P. Blanco.

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