Pese a que Redujo su Paquete Accionario, Carlos Slim se Mantiene Involucrado en The New York Times

En esos años, diversos medios informativos enfrentaban serios problemas económicos, y el New York Times no fue la excepción. La caída en las inversiones publicitarias redujo drásticamente el valor de sus acciones, lo que llevó a Slim a ver una oportunidad de inversión. En 2008, ya poseía un 6.8% de las acciones del diario y, en 2009, inyectó 250 millones de dólares mediante una serie de warrants (opciones) que podrían ejercerse en seis años.

Para 2015, Slim ejerció dichas opciones y aumentó su participación hasta el 17% de las acciones clase A, convirtiéndose en el principal accionista del Times. No obstante, no tuvo control absoluto del medio, pues la familia Ochs-Sulzberger mantuvo el poder sobre la empresa con su mayoría de acciones clase B.

En 2016, la participación de Slim en el NYT generó una controversia con el entonces candidato presidencial Donald Trump. El republicano acusó al diario de publicar artículos en su contra y sugirió que Slim influenciaba su contenido editorial en favor de Hillary Clinton, a quien el empresario había donado millones de dólares. Las empresas del magnate negaron cualquier tipo de injerencia en las decisiones del periódico. A pesar de esta tensión, Trump y Slim lograron limar asperezas tras una cena en Mar-a-Lago, residencia del presidente estadounidense.

En 2017, Slim decidió vender la mitad de su participación en el NYT, reduciendo su tenencia al 8% de las acciones. La operación fue estructurada de manera que le permitió parcializar el pago de impuestos, aunque la familia del magnate no reveló el monto de la ganancia obtenida. Según un informe del Financial Times publicado en diciembre de ese año, la acción del NYT había crecido significativamente: de menos de 5 dólares en 2009 a 18.60 dólares en 2017, con un repunte de casi el 40%.