Descubren Antigua Inscripción, Poniendo en Duda la Historia de la Escritura en la Edad del Hierro

• Un hallazgo en León desafía las creencias sobre la alfabetización en las comunidades prerromanas del norte de la Península Ibérica, mostrando una conexión sorprendente con otras culturas

Redacción/ CAMBIO 22

Las excavaciones en el yacimiento de La Peña del Castro, en la provincia de León, han revelado un hallazgo inesperado. Investigadores de la Universidad de León han identificado una inscripción en alfabeto celtibérico en una fusayola, un contrapeso utilizado en el hilado textil, datado en el siglo I a.C.

El descubrimiento es especialmente relevante porque contradice la creencia de que las comunidades del norte peninsular no tenían acceso a la escritura antes de la llegada de los romanos. La existencia de este signo alfabético dentro de un asentamiento local sugiere un grado de alfabetización desconocido hasta ahora.

Un signo enigmático con múltiples interpretaciones

El hallazgo de la inscripción ha abierto varias hipótesis entre los arqueólogos. Se cree que el signo grabado en la fusayola podría ser una marca de propiedad, una costumbre común en la época para indicar pertenencia o autoría. Culturas vecinas como la vaccea utilizaban símbolos similares a partir del siglo II a.C., lo que podría indicar un intercambio cultural entre regiones.

Sin embargo, la singularidad de esta inscripción dentro del yacimiento sugiere que su uso podría haber ido más allá de lo meramente práctico. Algunos investigadores plantean que el grabado pudo haber tenido un significado simbólico o de estatus, indicando un nivel de conocimiento reservado a ciertos miembros de la comunidad.

El objeto fue hallado en un área que se ha identificado como un almacén, junto a otros restos que reflejan la actividad económica del asentamiento, como semillas, carne curada y herramientas. Su asociación con este espacio refuerza la idea de que la escritura podría haber sido utilizada para identificar posesiones o incluso registrar información relevante para la comunidad.

¿Un conocimiento local o influencia externa?

Uno de los aspectos más intrigantes del descubrimiento es el material con el que fue fabricado el objeto. La fusayola está hecha de talco, un recurso disponible en el entorno inmediato del yacimiento. Esto sugiere que no llegó al asentamiento a través del comercio, sino que fue elaborado por la propia comunidad, lo que refuerza la idea de un conocimiento local sobre la escritura.

Este hallazgo se suma a otros ejemplos de inscripciones celtibéricas encontradas en la Península Ibérica, lo que podría indicar que el uso de la escritura en estos pueblos estaba más extendido de lo que se pensaba. Su presencia en un contexto cotidiano también sugiere que no solo era utilizada por élites, sino que podía haber estado presente en distintas capas de la sociedad.

Un hallazgo que desafía las creencias sobre la escritura en la Edad del Hierro

El descubrimiento de esta inscripción se enmarca en un proceso de cambio social que tuvo lugar en La Peña del Castro durante la Edad del Hierro. En este período, la comunidad experimentó un aumento de población, una mayor diferenciación social y un incremento en los intercambios comerciales.

El hecho de que aparezca un signo alfabético en este contexto sugiere que ciertos sectores de la población poseían conocimientos de escritura y los empleaban con distintos fines, desde lo funcional hasta lo simbólico.

La investigación sobre este hallazgo ha sido publicada en la revista Paleohispánica, especializada en lenguas y culturas antiguas de la Península Ibérica. Este estudio no solo amplía el conocimiento sobre la presencia de la escritura en el noroeste peninsular, sino que también plantea nuevas preguntas sobre cómo se transmitió y utilizó en estas sociedades.

Con cada nuevo descubrimiento, la historia de los pueblos prerromanos se vuelve más compleja, revelando que su conocimiento y organización eran mucho más avanzados de lo que se creía. Este pequeño objeto, aparentemente insignificante, podría ser la clave para comprender mejor la expansión y el uso de la escritura en el mundo antiguo.

Fuente: Gizmodo

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