Yolanda Gutiérrez/CAMBIO 22

ISLA MUJERES, Q.ROO, 17 de enero-. Isleños y residentes extranjeros exigen a la concesionaria Aguakan que, en lugar de presumir en redes sus “logros”, se dediquen a resolver los rebosamientos de aguas negras de sus alcantarillas, problema que se repite cada vez que llueve y provoca que prácticamente en toda la isla se perciba un cierto olor a heces fecales.

Los habitantes de Isla Mujeres están cansados de pagar altos costos por un servicio de suministro de agua potable que deja mucho que desear, a lo que se agrega el problema de las aguas negras rebosando a su máxima capacidad por toda la isla.

En la zona de Sac-Bajo prestadores de servicios turísticos han denunciado reiteradamente desde hace meses un registro de Aguakan del que, a la menor lluvia, emergen aguas negras mezcladas con grasas y aceites, que terminan desembocando en la laguna Makax.

En pleno centro, junto a la Terminal Marítima de APIQROO, junto a los mercados, en cualquier colonia, la lluvia provoca que los registros rebosen y el agua sucia que queda flotando impregna el aire con un peculiar aroma muy poco agradable.

Los isleños coinciden en asegurar que esto no pasaba antes y achacan el problema al exceso de edificaciones, que rebasaron con creces la capacidad de Aguakan pese a la construcción de nuevos cárcamos para aguas residuales.

Desde meses, por no decir años atrás, turistas y locales se ven obligados a sortear ríos de aguas negras y soportar la pestilencia los días de lluvia, sin que al parecer la empresa haga algo para remediar este problema de manera definitiva.

 

redaccionqroo@diariocambio22.mx

 

JFCB

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