La Búsqueda Por La Inmortalidad: Millonarios Apuestan Por La Extensión De La Vida Y Sus Posibles Consecuencias
26 Nov. 2024
-
En un futuro donde la tecnología pueda alargar la vida, expertos advierten sobre los riesgos de una élite privilegiada que podría acceder a tratamientos inaccesibles para la mayoría.
Redacción / CAMBIO 22
Los más ricos del planeta cada vez invierten más en la extensión de la vida, el campo tecno-científico emergente que busca que los humanos vivan más reduciendo el envejecimiento y engañando a la misma muerte. Hay algo aquí: los ricos quieren vivir para siempre y están dispuestos a gastar el Producto Bruto de una nación pequeña con tal de lograrlo.
El New York Post entrevistó hace poco a un ejecutivo corporativo que dijo que temía que el desarrollo de estas tecnologías llevara al aumento de una raza de “zombies privilegiados y ricos”. Phil Cleary, fundador del grupo SmartWater y contratista forense, le dijo al periódico: “A la velocidad con las que evoluciona la tecnología solo es cuestión de tiempo para que dispongamos libremente de drogas que alarguen la vida y que solo puedan adquirir los que pueden pagarlas”.
Cleary asumió la responsabilidad de decir lo que muchos pensamos al ver todo esto, y no habló bien de la banda de plutócratas: “La empecinada búsqueda de Silicon Valley de la fuente de la juventud es una tontería impulsada por el ego, guiada por el miedo, que implica un terrible costo humanitario a todo el planeta y sus habitantes más vulnerables”.

Para pocos
Cleary le dijo al periódico que los multimillonarios tecnológicos le harían un bien mayor a la humanidad donando dinero a las comunidades que tienen necesidad, y predijo que las tecnologías de extensión de la vida acabarían siendo solo para los más privilegiados: “Una píldora que mantenga viva a la gente, aunque fuera solo unas décadas, crearía un mundo injusto e inequitativo lleno de zombies ricos y privilegiados, gente predominantemente blanca y de clase media, los únicos que podrían comprar esas drogas. Los multimillonarios que están detrás de esta peligrosa investigación tendrían que dejar de jugar a ser Dios y reevaluar lo que significa la vida”.
“Es mucho más importante mantener vivos a los niños al menos hasta los 18 años de edad, en lugar de alargar la vida de los pocos privilegiados que ya han tenido la oportunidad de ver el mundo, tener hijos y cumplir con sus ambiciones especiales”, añadió Cleary.

No se sabe si la promesa de alargar la vida llegará a cumplirse alguna vez. Hay alguien que representa bien a este movimiento: Bryan Johnson, el capitalista inversor de 47 años que por medio de aparentes milagros de tecnología antienvejecimiento pasó de verse como un tipo normal de mediana edad a parecerse a un vampiro, según lo admitió él mismo. Johnson había empezado a vender una línea de suplementos y una “ Mezcla de Longevidad” para mantener la juventud. Además, se inyectó la grasa de otra persona en el rostro y tuvo una reacción alérgica que le infló la cara como un globo. Digamos que si eso es lograr la longevidad, lo raro es que se vea tan poco saludable.
Hay multimillonarios que han invertido millones en investigación y avances por lograr la longevidad. Y estaría bien si se distribuyera de manera asequible y equitativa entre todos los seres humanos del planeta. Pero si solo beneficia a los más ricos, tendríamos una clase gobernante permanente conformada por los únicos que podrían darse el lujo de adquirir lo prohibitivamente caro.
Fuente: Gizmodo
OSM/AGF





















