Redacción/CAMBIO 22

JOSÉ MARÍA MORELOS, 6 de noviembre. –   En las comunidades rurales de la zona maya el Bix Pixan sigue siendo fundamental del Hanal Pixan, la festividad maya que honra a los fieles difuntos. Esta práctica ancestral, sin embargo, se está olvidando en las zonas urbanas y entre las nuevas generaciones, desplazada en parte por la mercadotecnia y la influencia de los medios modernos.

José Manuel Poot Cahum, profesor e investigador cultural, destaca la relevancia del Bix Pixan dentro de la cosmovisión maya y lamenta cómo se ha ido relegando esta fecha esencial del calendario maya. “Para nuestros abuelos, el 8 de noviembre es un día importante, pues representa el momento en que las almas se despiden y regresan al más allá”, comenta Poot Cahum. Este día cierra el ciclo de celebraciones que permite la reunión espiritual con los difuntos, quienes, según la tradición, regresan temporalmente al mundo de los vivos durante el Hanal Pixan.

Aunque el 31 de octubre, el 1 y el 2 de noviembre son las fechas ampliamente conocidas y celebradas, especialmente bajo la influencia de los medios y la publicidad, la celebración maya del Bix Pixan extiende su alcance durante todo el mes. Las familias que no logran realizar sus ofrendas en los primeros días de noviembre preparan altares y comida en las semanas siguientes, manteniendo un espacio abierto para aquellos que no pudieron participar en la fecha principal.

La festividad, que se celebra de manera familiar, implica un trabajo en conjunto, donde niños, jóvenes y abuelos se reúnen para cocinar y disfrutar de platillos tradicionales como el pibil de calabaza y camote cocido en horno bajo tierra, llamado “pib” en lengua maya. Estas comidas, preparadas de manera cuidadosa y respetuosa, representan una conexión profunda con los ancestros, evocando los rituales antiguos que se han mantenido en los pueblos mayas a través de generaciones.

Para Poot Cahum, la mercadotecnia y las redes sociales han modificado el significado de la celebración, transformándola en una “oportunidad de juego o diversión” para muchos jóvenes. Sin embargo, en las comunidades rurales, el Bix Pixan sigue siendo una fecha importante en la que las familias se reúnen para recordar a sus seres queridos, reviviendo así una parte esencial de la cultura maya.

La celebración del Hanal Pixan es una ventana a las raíces espirituales de la comunidad maya, un recordatorio del respeto y el amor por los ancestros. Aunque el Bix Pixan se esté olvidando en algunos sectores, aún persiste en aquellos que reconocen su importancia y valoran el vínculo cultural que los conecta con su pasado.

 

redaccionqroo@diariocambio22.mx

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