🔊 Escuchar la nota

 

• Los registros de la Cámara de Diputados dicen que en casi 3 años de labor sólo ha presentado 16 iniciativas, ninguna de las cuales ha sido aprobada en definitiva ni promulgada, pero ninguna es de asuntos indígenas

• Tiene sólo 17 proposiciones de puntos de acuerdo, de los cuales más da la mitad fueron desechados, ninguno sobre asuntos indígenas

• Las reglas del INE para registrar candidatos indígenas son laxas, pero los ciudadanos de las comunidades pueden impugnarlos ante el TEPJF

 

Francisco Hernández/CAMBIO 22

CHETUMAL, 14 de enero.- Pese a que la secretaria de Gobierno, la presidenta estatal de Morena y la propia diputada federal apelaron su trabajo legislativo a favor de las comunidades mayas para defender la nominación que le dio Morena como precandidata al Senado por Quintana Roo en la acción afirmativa indígena, los registros en realidad revelan que Anahí González Hernández no ha impulsado acciones efectivas a favor de los indígenas en la Cámara de Diputados en los casi 3 años de su gestión.

Anahí González Hernández defendió su precandidatura al Senado como representante indígena afirmando que es la diputada por Quintana Roo que más iniciativas tiene, y la secretaria de Gobierno, Cristina Torres, dijo que la diputada ha metido muchas iniciativas relacionadas con el tema indígena y trabaja el tema, mismo argumento que dio la presidenta estatal de Morena, Johana Acosta Conrado, para justificar la designación.

Sin embargo según los registros su registro de actividades, la diputada federal Anahí González no ha dado atención prioritaria al tema ni tiene acciones positivas y efectivas a favor de las comunidades indígenas.

Según el Sistema de Información Legislativa de la Cámara de Diputados, donde se lleva el registro público de las actividades de cada diputado y diputada, como representante del distrito electoral federal 02 de Quintana Roo Diputada Anahí González Hernández sólo ha presentado 16 iniciativas de reforma durante su encargo, que inició en septiembre del 2021, en temas como el turismo, la familia, los delitos de género, la salud mental, la igualdad y la perspectiva de género, planeación del desarrollo, regulación del mar, educación y lactancia, pero ninguna relacionada con problemas del sur y la zona maya de Quintana Roo ni sobre las condiciones de los pueblos indígenas en general, con excepción de una que tiene relación indirecta, que propone impulsar regiones de turismo rural y artesanal.

Sin embargo, de todas sus iniciativas sólo 10 no han sido aprobadas en la Cámara de Diputados, y las 4 que le avalaron allí no han sido aprobadas por la Cámara de Senadores, una fue desechada y otra fue retirada, y entre las que no han sido aprobadas ni por los diputados está la que tiene relación con el turismo rural y artesanal.

De la misma forma, la diputada Anahí González Hernández ha presentado 17 proposiciones, de las cuales sólo 3 fueron aprobadas, mientras que 8 han sido desechadas y 6 están pendientes sin aprobar.

Lo más lamentable es que sus proposiciones que tienen relación directa con la zona sur de Quintana Roo y el propio estado, que eran sobre la Aduana de Subteniente López y el descuento de la CFE por temporada de calor fueron desechadas.

De hecho, la labor de Anahí González Hernández impactó más a las comunidades indígenas y a la zona rural que representa con su voto a favor de la aprobación de los cambios fiscales que hicieron que más productores agropecuarios paguen Impuesto sobre la Renta (ISR) al reducirles el margen de exención que antes tenían y cambiarlos de régimen.

Hay que recordar que eso repercutió en que los productores cañeros le hicieron reclamos públicos por la aprobación de esta medida fiscal, y la diputada hasta promovió una proposición para exhortar al SAT que hiciera jornadas de información sobre estas medidas que entraron en vigor en enero del 2022, pero hasta la fecha no ha sido aprobado y duerme el sueño de los justos en comisiones.

También se recuerda a la diputada porque su primer y único informe público de labores legislativas lo programó para realizarlo en Cancún, en diciembre del 2022, cuando estaba encaminada a realizar acciones de promoción personal de su imagen en busca de una futura candidatura a la presidencia municipal de Benito Juárez.

Pero con las críticas que le llovieron entonces por no presentar su informe legislativo en su distrito electoral, que es el del sur del estado, tuvo que programar un evento más pequeño después en Chetumal.

En ese informe, de 49 hojas, sólo una vez menciona la palabra ejido, 6 veces la palabra comunidades, 3 son de iniciativas presentadas por otros legisladores donde votó a favor y 3 cuando se refirió a visitas a comunidades, que no especificó.

Asimismo, resalta que la palabra indígena sólo la menciona 8 veces, y es en referencia a iniciativas presentadas por otros diputados.

“En enero del presente año, fueron atendidos los ciudadanos del Ejido de Zamora, Municipio de Bacalar en Quintana Roo, quienes, al encontrarse inmersos en un conflicto de despojo de tierras con empresarios de la zona, solicitaron mi apoyo a fin de obtener el documento oficial de la autoridad sobre el estatus actual de las tierras en conflicto (si han sido expedidos títulos de propiedad o no), así como el avance y futuro de las solicitudes de enajenación en trámite”, dice una mención.

“Informo también, puntualmente, las actividades sociales que he llevado a cabo en las comunidades que conforman el Distrito Dos del Estado de Quintana Roo”, pero sólo aparece una foto y no una relación de localidades visitadas.

“En cada recorrido por las comunidades, disfruto mucho dialogar y escuchar lo que a mi pueblo, los sueños de prosperidad, justicia social, igualdad y transformación con esperanza, son compartidos las familias del Distrito Dos Quintana Roo… En mis constantes recorridos, que realizo por las comunidades rurales de mi distrito, me han informado grandes y pequeños agricultores sus inquietudes ante el estancamiento de la producción de alimentos, forrajes, fibras y energéticos por causa del aumento del precio en los insumos básicos como los fertilizantes por lo que, me solicitaron llevar al Congreso la solicitud de apoyo al Gobierno Federal, a fin de que nuestro Estado sea incluido en el Programa Fertilizantes para el Bienestar”.

En efecto, para entonces la diputada ya había presentado una proposición sobre el programa de fertilizantes, en mayo del 2022, pero como ya no dio seguimiento al tema, hasta el día de hoy el asunto está congelado en las comisiones de la Cámara de Diputados y no ha sido aprobado.

El registro de sus actividades también reporta sus intervenciones ante el pleno en sesiones de la Cámara de Diputados e indica que sólo tomó la palabra en 12 ocasiones, hablando sobre el Covid-19, turismo, violencia hacia las mujeres, perspectiva de género y apoyo a los presupuestos federales aprobados.

Todo esto demuestra que sus acciones legislativas no han sido efectivas, pues ninguna ha llegado a la aprobación definitiva y la promulgación, ni han tenido impacto positivo en las comunidades mayas ni en el sur de Quintana Roo, de las cuales es diputada federal, y su efectividad se reduce a 3 puntos de acuerdo que le aprobaron, ninguno con relación a los pueblos indígenas.

De hecho, no forma parte de ninguna comisión relacionada a temas indígenas, sino que es integrante de las de Turismo, Bienestar, Igualdad de Género, Economía y Ganadería.

Su actividad política en los últimos años más se destacó por labores en el ámbito electoral y fuera del legislativo, pues fue coordinadora del equipo de transición de la gobernadora Mara Lezama y luego se dedicó a coordinar los grupos de apoyo a las aspiraciones de Claudia Sheinbaum a la candidatura de Morena a la presidencia de México.

No obstante lo anterior, las reglas del Instituto Nacional Electoral (INE) para postular las acciones afirmativas indígenas al Senado son laxas, puesto que no se tienen que cumplir requisitos estrictos para acreditarlas y eso facilita que la diputada federal Anahí González Hernández pueda ser postulada como representante de las comunidades mayas, aunque no sea indígena de origen y su labor legislativa no haya sido a favor de ellas.

Los criterios del INE para cumplir con esta representación sólo piden acreditar 3 de 10 posibles requisitos, lo cual facilita la postulación.

Estos son: a) Pertenecer a la comunidad indígena; b) Ser nativa de la comunidad indígena; c) Hablar la lengua indígena de la comunidad; d) Ser descendiente de personas indígenas de la comunidad; e) Haber desempeñado algún cargo tradicional en la comunidad; f) Haberse desempeñado como representante de la comunidad; g) Haber participado activamente en beneficio de la comunidad; h) Haber demostrado su compromiso con la comunidad: I) Haber prestado servicio comunitario; j) Haber participado en reuniones de trabajo tendentes a mejorar las instituciones o resolver conflictos en la comunidad; o k) Haber sido miembro de alguna asociación indígena para mejorar o conservar sus instituciones.

Asimismo, indica que en el caso de las personas que fueron electas como diputadas o diputados en alguno de los distritos indígenas en el que en los últimos dos procesos electorales no fue obligatorio personas de esa adscripción, deberá acreditar el vínculo con la comunidad indígena mediante los elementos anteriormente señalados.

Este es el caso de Anahí González, puesto que aunque el distrito electoral federal 02 está clasificado por el INE como indígena, en los dos procesos electorales pasados no fue obligatorio que en éste se eligiera un representante indígena, y por eso ella misma pudo ser diputada siendo originaria y residente de Cancún, no del distrito que finalmente representó.

Para eso, sólo le basta entregar un escrito donde dice que se autoadscribe como indígena, con una constancia expedida por una asamblea general comunitaria, una asamblea tradicional, o un ejido.

 

No obstante, la postulación de una candidatura indígena que se considere no representativa pueda ser impugnada, no sólo por los partidos políticos, pues también los ciudadanos indígenas pueden hacerlo, como recientemente sucedió en el estado de Yucatán en 2021, donde Liborio Vidal, del PAN; Alpha Tavera, de Morena; y Jorge Canul, de Movimiento Ciudadano, fueron inscritos como candidatos indígenas a diputados federales, pero fueron revocados por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) por no demostrar fehacientemente su vinculación como las comunidades que pretendían representar.

 

franciscohacambio22@gmail.com

HBS