Selene Tamayo Echeverría/CAMBIO 22

MÉRIDA, YUC., 13 de julio.- Ya ha pasado un mes desde que el pequeño Iker perdiera la vida en un trágico accidente automovilístico, por lo cual su cadáver permanece en los congeladores de la Semefo, por lo que, la Comisión de Derechos de Yucatán (Codhey) sigue de cerca el caso, buscando que no se sepulte al infante en la fosa común, sino que se le brinde un espacio propio para descansar, así lo informó Miguel Óscar Sabido Santana, titular de esta oficina.

“Estamos en los tiempos, esperando qué ocurre, pero sí vigilantes del tema, evidentemente el asunto destapó un problema que se vivía en la ciudad en relación con los niños que trabajan en la calle, se presume que era objeto de abuso, explotación y trata”, señaló.

Es preciso mencionar, que de igual forma otras instancias del Gobierno de Yucatán, están trabajando para afinar la estrategia en relación al combate contra el trabajo infantil.

Sabido Santana también indicó que este es un tema en el que se deben involucrar autoridades y sociedad en conjunto, pues se traen personas, ideas y proyectos en busca de consolidar una estrategia común.

Es importante mencionar que, el titular de Codhey, exhortó al público en general a no bajar la guardia ante esta problemática, pues indicó que desde hace años Yucatán padece este mal, que ha sido atendido por diferentes autoridades sin embargo no de una forma constante.

Para finalizar, dijo que desconoce cuánto tiempo queda para poder reclamar el cuerpo de Iker para evitar que sea enviado en la fosa común.

 

techeverria.selene@gmail.com

RHM

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