Laura Beytia/CAMBIO 22

CHETUMAL, 8 de junio.- Los turistas nacionales y extranjeros que visitan destinos como Majahual, están obligados a pagar el Derecho de Saneamiento Ambiental (DSA) por hacer uso de los hoteles, cobro que se debe destinar a mitigar el daño ambiental que generan las actividades relacionadas con el turismo.

Pero a pesar de que la que la recaudación se ha transferido de manera puntual al Ayuntamiento de Othón P. Blanco, los prestadores de servicios turísticos de la costa maya desconocen el destino final de dichos recursos, ya que aseguran, que no se les ha proporcionado un informe detallado del manejo de dicho dinero y el cual, no se le retribuye de ninguna manera a este destino, afirmó Rodolfo Espadas Ixte.

“La verdad es que no sabemos que se hace con el dinero que se cobra por este derecho y que mensualmente tenemos que ingresar al municipio, no nos han informado en qué se utiliza o a que se está destinando, no hay transparencia y consideramos que siendo los que tenemos que dar la cara ante el turismo para que paguen el saneamiento ambiental, pues deberíamos conocer en qué se gasta, vamos a tratar de tener un acercamiento con la autoridad para plantearle esta inquietud y pedirle pues cuentas claras más que nada como debe de ser.”

El vicepresidente de la Asociación de Empresarios Turísticos de la Costa Maya, dijo que los recursos que ingresan a las arcas municipales, deberían ser utilizados para atender el problema de sargazo lo que no ocurre, ya que las jornadas que se han llevado a cabo han sido únicamente dos en lo que va del año y por unas cuantas horas al día, siendo los propios empresarios los que tienen que mantener la recolecta del alga diariamente, con los costos que esto implica y que solventan con recursos propios.

“Supuestamente el dinero del saneamiento ambiental es para darle mantenimiento a las playas y atender el problema del sargazo, pero solo han venido en dos ocasiones a limpiar por unas horas cuando esto es diario, nosotros tenemos que desembolsar recursos para que las playas se mantengan limpias porque somos los más afectados si dejamos que el alga se acumule, estamos saliendo adelante con nuestro propio dinero, esfuerzo y capacidad.”

El cobro por este derecho, es el equivalente al 4% sobre la tarifa por habitación, por lo que es variable lo que mensualmente cada centro de hospedaje registra, pero que normalmente va desde los 500 hasta los mil pesos.

La llegada de la macro alga a las playas ha ido disminuyendo gracias a la barrera artesanal que instalaron los empresarios, por lo que confían en que para el inicio del verano, esto atraerá más turismo.

 

 

lau.beytia@diariocambio22.mx

JFCB

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