Ganaderos Alertan Por Importaciones De Carne Sin Control Y Riesgo Para 750 Mil Productores

• CNOG y Opormex advierten que el ingreso de hasta 120 mil toneladas de carne extranjera desplaza la producción nacional y rompe la competencia sanitaria

• Sector ofrece más de 400 mil cabezas de ganado al mercado interno y pide limitar importaciones para proteger la soberanía alimentaria

Redacción / CAMBIO 22 

Organizaciones ganaderas advirtieron que la importación de carne desde países sin tratado comercial, principalmente Brasil, podría alcanzar este año las 120 mil toneladas, desplazando a proveedores nacionales y poniendo en riesgo la producción de 750 mil productores. Ante el cierre de la frontera con Estados Unidos, ofrecieron al mercado interno más de 400 mil cabezas de ganado de calidad de exportación.

Ganaderos de todo el país lanzaron una alerta por el incremento en las importaciones de carne desde países sin tratado de libre comercio, especialmente Brasil, las cuales podrían cerrar el año en 120 mil toneladas. Señalaron que este flujo creciente está generando un desplazamiento directo de la producción mexicana.

La Confederación Nacional de Organizaciones Ganaderas (CNOG) y la Organización de Porcicultores Mexicanos (Opormex) denunciaron que esta política pone en riesgo a más de 750 mil productores, quienes enfrentan una competencia desigual frente a proveedores que no cumplen los mismos estándares sanitarios y de trazabilidad.

Los ganaderos reconocieron que la apertura de importaciones se decretó para combatir la inflación como parte del Paquete Contra la Inflación y la Carestía (PACIC), pero advirtieron que la estrategia no puede continuar sacrificando la sanidad, la competitividad y la estabilidad del mercado nacional.

A pesar de los objetivos del PACIC, afirmaron que los altos volúmenes de importación no han generado un beneficio directo al consumidor final. Por el contrario, aseguran que la medida ha provocado distorsiones en el mercado y ha presionado a la baja los precios pagados al productor.

Ante la crisis, el presidente de la CNOG, Homero García de la Llata, anunció que el sector ganadero mexicano decidió responder ofreciendo al mercado interno cerca de 420 mil cabezas de ganado de calidad de exportación, listas para abastecer a la industria nacional de la carne.

Este hato no ha podido enviarse a Estados Unidos debido al cierre unilateral de la frontera al ganado en pie, implementado por el gobierno de Donald Trump, lo que ha generado una acumulación inédita de animales listos para engorda.

La CNOG propuso que el cupo máximo de importaciones provenientes de países sin tratado comercial sea limitado a 70 mil toneladas anuales, para evitar el desplazamiento de la producción nacional y mantener condiciones de competencia leal.

La organización recordó que las balanzas comerciales de proteína animal muestran un superávit sostenido en el sector bovinos carne, el cual tiene capacidad para abastecer el mercado interno al 100% sin necesidad de recurrir a compras masivas en el extranjero.

En el caso de la carne de cerdo, Jorge Iván Espinosa Vázquez, presidente ejecutivo de Opormex, pidió al Gobierno Federal mantener el cupo actual de 51 mil toneladas dentro del PACIC para el próximo año. Advirtió que, si se elimina o rebasa ese límite, las importaciones de carne de cerdo podrían superar las 130 mil toneladas para 2026, comprometiendo la soberanía alimentaria y poniendo en riesgo a miles de productores nacionales.

Los porcicultores reiteraron que, aunque el PACIC busca proteger el bolsillo de las familias, la estrategia ha perdido efectividad: los precios al consumidor no han disminuido y los volúmenes de importación no guardan relación con los precios monitoreados por Profeco.

Señalaron además que el Plan México para la Industria Porcina, impulsado por Opormex, plantea alcanzar un 70% de abastecimiento nacional hacia 2030, objetivo que se ve amenazado por la competencia desleal y la falta de control sanitario en algunas importaciones.

Finalmente, ambas organizaciones advirtieron que las compras de carne a países sin equivalencia sanitaria representan amenazas a la bioseguridad, a la estabilidad de precios y a la economía familiar. “Proteger al campo mexicano es proteger a México”, subrayaron.

Fuente: El Heraldo de Chihuahua

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