Omisión de Desarrolladores Deja en el Abandono a 8 Mil Lotes en 15 Fraccionamientos; Benito Juárez Analiza Expropiar Vialidades para Poder Dotar de Servicios

Jimena Madrigal / CAMBIO 22  

La omisión de desarrolladores que abandonaron fraccionamientos sin concluir su entrega al municipio ha dejado en rezago a cerca de 8 mil lotes en 15 fraccionamientos en Benito Juárez, donde miles de familias viven sin acceso pleno a servicios públicos y ante este escenario, el Ayuntamiento analiza la expropiación de vialidades como vía para recuperar el control de las zonas afectadas y permitir la inversión pública.

El regidor Samuel Mollinedo, de la Comisión de Desarrollo Urbano y Movilidad, señaló que al menos 15 fraccionamientos quedaron en condición de abandono por parte de empresas que desaparecieron, se declararon en quiebra o simplemente no cumplieron con sus obligaciones legales de entrega formal y debido a ello, las vialidades continúan en un limbo jurídico que impide al municipio realizar obras de alumbrado, pavimentación y mantenimiento urbano.

“Tenemos claros casos como Paseos del Sol, Urbi o Quetzales. El Instituto de Regulación y Bienestar está trabajando mesas técnicas con la Consejería Jurídica para ver la manera de expropiar estas vialidades y que pasen a dominio municipal”, explicó.

Mollinedo destacó que varias de las desarrolladoras dejaron de existir, lo que hace prácticamente imposible que reclamen algún pago por la expropiación.

Agregó que la reforma a la Ley de Expropiación estatal, realizada hace dos años, da hoy a los municipios un camino jurídico más claro para intervenir en zonas que llevan décadas varadas por negligencia empresarial.

Actualmente, entre 60 y 70 desarrollos están en proceso de municipalización, de los cuales 28 ya concluyeron el trámite. Uno de los casos más representativos es el fraccionamiento Quetzales, entregado hace 20 años mediante un acta de entrega-recepción, pero sin escrituras de las calles, pues la normativa de entonces no exigía ese requisito.

El regidor recordó que incluso avenidas emblemáticas como Kabah, Bonampak, Cobá, Xcaret y 20 de Noviembre carecen de escrituras, pese a haber recibido inversión pública durante años, lo que evidencia que la falta de documentación no es un obstáculo nuevo, sino un rezago arrastrado por malas prácticas históricas de desarrollo urbano.

“Durante años fue fácil decir que no se podía intervenir porque no estaban municipalizados, pero esa omisión inicial fue de los desarrolladores, y quienes pagan las consecuencias son los ciudadanos”, afirmó.

Dijo que antes de que termine el año habrá una reunión entre las comisiones de Planeación Municipal, Obras y Servicios Públicos, Desarrollo Urbano, Movilidad y Hacienda para establecer un criterio definitivo sobre la regularización y la posible expropiación de vialidades.

El Ayuntamiento busca cerrar este capítulo de rezago y corregir las afectaciones derivadas de proyectos inmobiliarios que nunca cumplieron con sus obligaciones de entrega y municipalización y para evitar que el tema se repita ahora desde la Secretaría de Ecología y Desarrollo Urbano se condiciona la entrega de nuevos permisos para las empresas desarrolladoras que no hayan cumplido con la entrega de sus fraccionamientos.

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