Cruz Azul Femenil Borra al Pachuca 5-0 en su Cancha y Hace Historia

Redacción / CAMBIO 22

El cielo del Estadio Hidalgo se vistió de esperanza para el equipo femenino de Cruz Azul Femenil. Tras una campaña marcada por la ilusión y el trabajo silencioso, las Cementeras lograron ese momento que hace años parecía lejano: clasificaron por primera vez a las Semifinales de la Liga BBVA MX Femenil. Y lo hicieron con autoridad, imponiéndose nada menos que 5-0 a las actuales campeonas Pachuca Femenil, en el duelo de vuelta de Cuartos de Final.

Desde el silbatazo inicial, La Máquina femenil mostró determinación. Sabía que tenía que superar obstáculos de fondo: jugaban fuera de casa, ante un rival que había logrado ventaja en la ida, y con la necesidad de remontar un marcador adverso. Pero más que la estadística, lo que sobresalió fue la claridad táctica, el dinamismo colectivo y una individualidad que se alzó como estandarte: Ana Lucía Martínez, quien abrió el marcador, generó un penal y dejó su sello en asistencias y presión constante.

La presión previa era alta: Pachuca llegaba con ventaja global gracias a su victoria 2-1 en la ida, plus de clasificación por mejor posición en la tabla, lo que obligaba a Cruz Azul a ganar por dos goles o más para avanzar. Pero lo que muchos veían como una hazaña poco probable, terminó siendo una demostración de carácter.

La goleada que quedará en la historia

Desde temprano en el partido de Vuelta, el equipo cementero dejó claro que no iba a especular. Ana Lucía Martínez abrió el marcador con una definición precisa, alimentando la ilusión que recorre a la afición. A partir de ahí, el dominio se amplió: se generaron ocasiones, se presionó, se dejó poco espacio al rival y cuando las Tuzas intentaron reaccionar, encontraron a una Máquina bien montada defensivamente y rápida en las transiciones. El penal generado por Martínez fue el detonante de que un 2-0 ya comenzara a percibirse como posible, y al final el 5-0 redondeó una noche inolvidable.

¿Por qué es histórico?

Porque nunca antes las cementeras habían llegado a esta instancia. Esta victoria no sólo es un triunfo más: representa un hito en la historia del club femenino. Significa que el proyecto, el plantel, el esfuerzo de jugadoras, cuerpo técnico y directiva se alinearon para romper la barrera. Además, derrotar por goleada a un equipo acostumbrado a estar en fases decisivas como las Tuzas resalta aún más el logro.

Qué sigue para La Máquina

Ahora, el camino se abre hacia la antesala de la Final. No será sencillo: en Semifinales aterrizarán equipos con historia, recursos y presión. Pero esta noche ha demostrado que Cruz Azul Femenil ya no teme, que puede soñar en grande. El mensaje queda claro tanto para sus rivales como para su afición: aquí estamos para competir, para hacer historia.

En el cierre, esta goleada duerme en la memoria colectiva y en los anales del club: 5-0, la hazaña, el momento. Porque en el futbol, como en la vida, hay noches en que todo se alinea para que el sueño se convierta en realidad. Y esta fue una de ellas.

Fuente: Récord

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