Redacción/CAMBIO 22

Carlos Manzo no murió hoy.

Lo mataron hace meses, cuando advirtió que lo querían callar, cuando rogó protección, cuando denunció amenazas… y el gobierno respondió con su clásico silencio cómplice.

– Lo dejaron solo.

– Lo dejaron morir.

– Lo dejaron en manos de los mismos a quienes juraron combatir.

Fueron Alfredo Ramírez Bedolla, Raúl Morón, Claudia Sheinbaum, fueron MORENA.

– Todos lo escucharon.

– Nadie movió un dedo.

Porque en la 4T los héroes estorban, los valientes incomodan y los cobardes gobiernan.

¿Cuántos más tienen que morir para que esta “transformación” deje de ser una farsa sangrienta?

Carlos Manzo fue un líder incómodo, valiente, sin precio ni correa.

Y en un país donde el valor se paga con la vida, su asesinato no fue casualidad: fue una sentencia firmada con indiferencia y sellada con impunidad.

❌ No fue un crimen cualquiera.

❌ Fue un crimen anunciado.

❌ Fue un crimen permitido.

Hoy, mientras los de chaleco guinda se reparten culpas y frases huecas, el país se pregunta:

¿Dónde están los abrazos? ¿Con quién están, con los buenos o con los asesinos?

– Carlos Manzo pidió ayuda.

– No se la dieron.

– Y por eso, hoy, México grita: FUE MORENA.

¡Esos de Morena no tienen ni TANTITA MADRE !

 

 

Redacción/CAMBIO 22

Fuente:

redaccionqroo@diariocambio22.mx

RHM/RCM

 

WhatsApp Telegram
Telegram


WhatsApp Image 2025 12 01 at 12.34.34 AM
WhatsApp Image 2025 12 01 at 12.34.34 AM