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• Harry Rodríguez y Andrés Fernández del Valle se graban bebiendo y diciendo incoherencias producto del elevado estado de ebridad en el que se encuentran

 

• El video reaviva críticas al PVEM por premiar con curules plurinominales a políticos improductivos y alejados de las causas ciudadanas

 

Gabriel Hernández / CAMBIO 22

Las redes sociales mostraron un ejemplo alarmante de prepotencia y desapego al servicio público por parte de dos legisladores del Partido Verde Ecologista de México (PVEM).

El 22 de octubre, el diputado local de Yucatán Harry Gerardo Rodríguez Botello Fierro publicó un video en la cuenta oficial de Instagram del PVEM en el que aparece en una mesa de bar, con música de fondo, presumiendo su apellido “doble y doble”, levantando un caballito de mezcal y bebiéndolo para terminar con la frase: “Y mañana, probablemente voy a ser un desempleado y me vale…”.

Exhiben b0rr@ch0 al dirigente del Partido Verde de Campeche, Andrés Fernández del Valle Laisequilla.
Las imágenes circulan en redes sociales a través de una página local del Pardito Verde en Yucatán en donde el funcionario también fue coordinador de ese instituto político. pic.twitter.com/w1TsZ7xUCH

— #NCSnoticias (@NCSCampeche) October 23, 2025

En el segundo video, es Andrés Fernández del Valle Laisequilla quien vuelve a aparecer en redes sociales, esta vez acompañado por el diputado Harry Rodríguez Botello Fierro, ambos se muestran en evidente estado de ebriedad, hablando incoherencias y lanzando frases sin sentido mientras se identifican por su nombre y sellan su “pacto” con un apretón de manos, como si se tratara de un reto o un juego entre ellos. La grabación concluye con un silbido al aire, al puro estilo de barrio, una escena que ha generado críticas generalizadas por la falta de mesura y respeto que exhiben dos legisladores que deberían representar con seriedad a la ciudadanía.

🗣️Escándalo en el PVEM: Diputados de Yucatán y Campeche se Exhiben Ebrios y Desatan Indignación Ciudadana👥 pic.twitter.com/GDF1ngIIxb

— Diario CAMBIO 22 (@DiarioCAMBIO22) October 27, 2025

Ambos mensajes fueron grabados en evidente estado de ebriedad y difundidos por ellos mismos.

En una sociedad que juzga con severidad a cualquier conductor alcoholizado, resulta absurdo que funcionarios que reciben un salario público decidan exhibirse borrachos en sus redes. El consumo de alcohol es una elección personal, pero la falta de prudencia muestra lo alejados que están de la realidad que viven sus representados.

Más allá del tono festivo, los videos evidencian una actitud arrogante, un uso frívolo del poder y la percepción de impunidad que otorgan las curules obtenidas sin ganar en las urnas. La difusión de ambos clips motivó críticas inmediatas en redes sociales y reavivó el debate sobre la responsabilidad de quienes acceden al Congreso por la vía plurinominal.

Trayectoria de Andrés Fernández del Valle Laisequilla

Andrés Fernández del Valle Laisequilla tiene 42 años (nacido el 29 de diciembre de 1982).

De acuerdo con su ficha curricular de la Cámara de Diputados, estudió la carrera de Derecho y realizó múltiples diplomados, entre ellos dos en Historia de México (2010–2011), cursos sobre ecología, economía globalizada y un programa de campañas electorales.

Su trayectoria política comenzó en la delegación Coyoacán, coordinó brigadas del PVEM en 2006, presidió el comité delegacional en 2007 y fue representante ante el Instituto Federal Electoral en 2008, intentó ser diputado local por Coyoacán en 2009 y participó en la comisión de honor del PVEM del Distrito Federal.

En 2012 se mudó a Yucatán como asistente ejecutivo de su amigo Harry Rodríguez en el Congreso local.

En 2015 fue representante del PVEM ante el instituto electoral de Yucatán y coordinador de elecciones, lo que le permitió colocarse como candidato plurinominal a diputado federal por la tercera circunscripción; así llegó a la LXIII Legislatura (2015‑2018), en ese periodo fue secretario de la Mesa Directiva en la Cámara de Diputados.

Para 2024 volvió a ser postulado como plurinominal, pero ahora para el Congreso del estado de Campeche; al mismo tiempo fungía como delegado nacional del PVEM en Yucatán. Su carrera ha estado marcada por los privilegios de las listas proporcionales y por la cercanía con Rodríguez Botello Fierro.

Pese a su currículum, los resultados legislativos son raquíticos. Según el diario La Jornada, en la actual LXV Legislatura de Campeche Fernández del Valle es el legislador con más inasistencias y, después de un año en el cargo, no ha presentado ninguna iniciativa ni punto de acuerdo. El propio video expuesto recientemente confirma su falta de respeto por el trabajo legislativo; ante la cámara se burla de un posible despido, como si su puesto fuera un premio vitalicio y no un mandato ciudadano.

Perfil de Harry Gerardo Rodríguez Botello Fierro

Harry Rodríguez, originario de Puebla, lleva más de dos décadas viviendo de la política. Su paso por el sector privado se limita a una pasantía en el despacho Velázquez y Asociados entre 2001 y 2002; en 2002 se incorporó a la secretaría de organización del PVEM en la Ciudad de México.

Desde entonces ha ocupado todo tipo de cargos dentro de la estructura del partido y se ha reciclado como legislador plurinominal en varias ocasiones.

Fue diputado local en Yucatán en 2012 y nuevamente en 2021, ambos puestos logrados por la vía proporcional.

También preside el PVEM en Yucatán desde hace más de una década.

El diputado verde es señalado como un cacique que ha vivido los últimos 22 años del presupuesto público y cuyo historial laboral carece de trabajos ajenos a la política.

El partido bajo su mando en Yucatán casi no crece, pero conserva su registro electoral “con las uñas” y con ello accede al financiamiento público.

En 2024 el PVEM era la quinta fuerza política de Yucatán y superaba sólo al Panal y al PRD.

Harry percibe más de 112 000 pesos al mes entre sueldo y dietas y administra un presupuesto de más de 12 millones de pesos anuales.

Más grave aún, Rodríguez Botello Fierroha sido acusado de “haber secuestrado al Partido Verde en Yucatán y que se ha convertido en millonario gracias al partido del Tucán”.

Denuncias públicas reflejan que en la entidad el PVEM recibe al menos 15 millones de pesos anuales de financiamiento público (12 millones del gobierno estatal), más cuotas y aportaciones de Morena, pero los recursos desaparecen porque el partido carece de estructura y sus dirigentes no realizan trabajo político.

En la elección de 2018 apenas conservaron el registro con 22 000 votos; en 2021 no obtuvieron ninguna diputación de mayoría, pero Rodríguez se colocó primero en la lista plurinominal y obtuvo curul con apenas el 3 % de la votación.

La prensa lo ha criticado severamente de no saber hacer otra cosa que vivir de la política y que el PVEM vive de alianzas con partidos más grandes

La publicación del video del 22 de octubre se suma a esta trayectoria de privilegios y negligencia.

Rodríguez Botello Fierro ha ocupado una curul en el Congreso desde 2012, fue reelecto como dirigente pese a la alianza con Morena y volvió a obtener una diputación plurinominal en 2024.

Pese a su permanencia, es uno de los diputados más improductivos y quien se ausenta con mayor frecuencia de las sesiones de comisiones y plenarias, cuando asiste, suele ser para votar dictámenes que perjudican a la ciudadanía, como la reforma a la Ley del Isstey o la designación de un magistrado denunciado por violencia intrafamiliar.

Tras difundirse el video, el legislador aseguró que su cuenta fue “hackeada”, pero no explicó el origen de la grabación.

El escándalo de los videos ocurrió en un momento en que el PVEM enfrenta un desgaste interno y externo.

Apenas en el trascurso de la mañana de hoy se informó que el Comité Ejecutivo Nacional del PVEM asumió la dirigencia estatal en Yucatán y convocó a una asamblea para renovarla en noviembre.

El comunicado precisó que la nueva presidencia será ocupada por una mujer y que Harry Rodríguez ya no desempeña las funciones de presidente.

Aunque el partido atribuyó el relevo a la “temporalidad” de la dirigencia, el contexto sugiere que las polémicas por la falta de resultados y la exhibición pública de su líder influyeron en la decisión.

En Campeche, la difusión del video de Andrés Fernández del Valle coincide con las críticas por su escasa productividad.

Hasta octubre de 2025 no había presentado iniciativas y era el diputado con más faltas en la LXV Legislatura. Su actitud desafiante en redes sociales afirmar que le da igual ser despedido evidencia un desprecio por su responsabilidad y por los electores que, aunque no votaron directamente por él, deben soportar las consecuencias de un representante ausente.

El abuso del poder y la cultura del privilegio

Tanto Harry Rodríguez como Andrés Fernández del Valle accedieron a sus cargos por la vía plurinominal.

Esta figura, creada para garantizar representación proporcional de minorías, se ha convertido en un refugio para políticos que nunca compiten en las urnas y que, sin embargo, controlan presupuestos y decisiones. La plurinominalidad permite que dirigentes partidistas se coloquen en los primeros lugares de las listas, se perpetúen en los congresos y ejerzan poder sin rendir cuentas.

El caso de los dos diputados verdes es paradigmático, combinan un historial de ausencias, nula producción legislativa y señalamientos de malversación de recursos con un discurso frívolo en redes que banaliza el trabajo del Congreso.

La difusión de estos videos debería ser un punto de inflexión, si bien nadie puede ser juzgado por consumir alcohol en su vida privada, la gravedad radica en la exhibición pública, la arrogancia de anunciar que un despido “no importa” y la implicación de que los puestos legislativos son simples cuotas de poder.

Los ciudadanos de Yucatán y Campeche merecen representantes que trabajen, comparezcan a las sesiones y honren el presupuesto que pagan con sus impuestos.

Las dirigencias partidistas tienen la responsabilidad de sancionar la conducta de sus militantes y evitar que la plurinominalidad se convierta en sinónimo de impunidad.

El incidente protagonizado por Harry Rodríguez Botello Fierro y Andrés Fernández del Valle Laisequilla muestra que los abusos y excesos no son una casualidad sino el resultado de una cultura política que premia la lealtad partidista por encima del servicio público. Ambos legisladores pertenecen a un partido que se mantiene gracias a alianzas y al financiamiento público, y han ocupado sus cargos sin rendir cuentas ni producir leyes en beneficio de la ciudadanía.

Su decisión de grabarse en estado de ebriedad y presumir que no les importa perder el empleo subraya la desconexión con la realidad de sus representados.

Más que un desliz, los videos son la evidencia de una forma de entender la política, como un botín personal y no como un mandato para servir.

 

Con información del Sistema de Noticias CAMBIO 22

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