Abogado Denuncia Irregularidades en el Poder Judicial de Chetumal

• “Parece que protegen a los agresores”,  señala.

Ricardo Jesús Rivas/ CAMBIO 22

CHETUMAL, 25 de octubre. – La crítica situación del sistema de justicia en Quintana Roo volvió a quedar bajo la lupa pública luego de que el abogado Wilberth Ruthinoff Domínguez denunciara en sus redes sociales una serie de irregularidades procesales en un caso de robo a casa habitación en Chetumal. Según su relato, en tres audiencias —con una cuarta programada para el 27 de octubre— distintos jueces han favorecido a los presuntos responsables, intentando liberarlos mediante una suspensión condicional sin garantizar la reparación total del daño ni permitir que la víctima sea escuchada.

En una publicación que rápidamente circuló entre la comunidad jurídica y política local, el abogado cuestionó la actuación del Poder Judicial del Estado, señalando que el proceso está marcado por decisiones contradictorias y, presuntamente, arreglos internos para beneficiar a los agresores.

“Tres jueces distintos, tres oportunidades para hacer justicia… y tres veces en que el Poder Judicial en Chetumal parece más interesado en proteger a los agresores que en defender a la víctima”, escribió Domínguez.

Su cliente, agregó, fue asaltado a plena luz del día y actualmente enfrenta complicaciones médicas, por lo que había solicitado un breve plazo para poder comparecer, el cual fue revocado sin justificación legal.

La denuncia pública no es aislada, además, exhibe la desconfianza creciente hacia las instituciones judiciales y el sentimiento de vulnerabilidad de quienes buscan justicia en el sur del estado. El abogado aseguró contar con videograbaciones, pruebas y actas que demuestran las inconsistencias del proceso, señalando que se intentó incluso realizar audiencias sin notificación a la parte afectada. Su reclamo interpela directamente al Tribunal Superior de Justicia y a la Gobernadora Mara Lezama, al advertir que “la justicia se está torciendo en favor de quienes delinquen, mientras las víctimas quedan en el abandono”.

El caso simboliza el desgaste institucional que enfrenta el sistema judicial quintanarroense, marcado por señalamientos de corrupción, falta de independencia y decisiones discrecionales. Más allá del litigio en curso, la publicación del abogado chetumaleño, despierta la polémica ciudadana sobre la calidad moral y profesional de quienes imparten justicia en el estado. En Chetumal, donde la confianza pública en los tribunales se encuentra en niveles mínimos, la denuncia del abogado expone un proceso irregular y una verdad incómoda.

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