Alejandro López / CAMBIO 22

Cancún, Q. Roo, 30 de Septiembre.- El atraso en la infraestructura hídrica y sanitaria bajo responsabilidad de Aguakán, particularmente en el municipio de Benito Juárez, supera los 5 mil millones de pesos.

Esta situación ha generado una falta significativa de cobertura en diversas colonias y ha implicado incumplimientos en sus obligaciones como concesionaria.

Aunque Quintana Roo reporta una cobertura estatal del 97% en agua potable y del 78% en drenaje sanitario, en Cancún aún existen zonas urbanizadas que carecen de servicios básicos.

Por ejemplo, algunas colonias céntricas, donde la ausencia de drenaje ha sido calificada como “inverosímil”, al tratarse de áreas plenamente integradas a la mancha urbana.

Hugo Garza Sáenz, director general de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA), precisó que la empresa deberían ampliar la cobertura más allá de la mancha urbana sin condicionar a los desarrolladores a invertir en infraestructura.

“Es responsabilidad de la concesionaria hacerlo. No es solo rezago o déficit: el problema no radica en la disponibilidad del agua, sino en su calidad, como la dureza del líquido. La falta de inversión de Aguakán, solo en Cancún, supera los 5 mil millones de pesos en los últimos cuatro o cinco años”, señaló.

Como ente regulador, CAPA realiza auditorías y evaluaciones semestrales para verificar el cumplimiento de tres ejes fundamentales: cobertura, calidad del servicio y eficiencia en la gestión.

Las irregularidades detectadas han derivado en sanciones administrativas y en procedimientos legales que podrían definir el futuro de la concesión.

“La instrucción de la gobernadora ha sido clara: no se permitirá el incumplimiento. Si Aguakán falla, habrá consecuencias”, advirtieron autoridades estatales.

A este rezago se suma el impacto de los cortes eléctricos recurrentes en la región, como el ocurrido la semana pasada.

Estos afectan directamente la operación de las plantas de bombeo y tratamiento, que dependen del suministro eléctrico para funcionar adecuadamente.

Si bien algunas instalaciones cuentan con generadores de respaldo, en muchas comunidades rurales la falta de este equipo hace que una interrupción eléctrica de apenas unos minutos provoque retrasos de hasta 12 horas en la restitución del servicio de agua potable.

 

 

redaccionqroo@diariocambio22.mx

RHM

 

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