• Testigos aseguran que pedía atención médica, mientras que el instituto sostiene que incurrió en conductas inapropiadas

• El caso abre debate sobre protocolos de seguridad en hospitales y el acceso a servicios médicos en Quintana Roo

Gabriel Hernández/ CAMBIO 22

Chetumal, Quintana Roo. -La detención de un hombre en el Hospital General de Zona con Medicina Familiar (HGZ/MF) No. 1 del IMSS en la capital del estado desató controversia entre usuarios y la institución.

El hecho, ocurrido a inicios de semana, generó versiones encontradas, mientras testigos aseguran que el ciudadano exigía atención médica y terminó arrestado, el IMSS negó haber rechazado el servicio y afirmó que se trató de un incidente por “actos inapropiados”.

La versión de los testigos

De acuerdo con personas presentes en la sala de espera, el hombre llegó a exigir ser atendido, aun cuando no portaba su carnet de derechohabiente, la discusión escaló al punto de que personal médico pidió la intervención de la policía.

Los testigos afirmaron que el detenido solicitaba atención y se mostraba alterado al no recibir una respuesta favorable, lo que derivó en que agentes lo retiraran del hospital bajo protesta.

Videos y comentarios difundidos en redes sociales señalaron el hecho como un ejemplo de exceso burocrático y falta de sensibilidad ante una persona que buscaba servicios médicos.

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— Diario CAMBIO 22 (@DiarioCAMBIO22) September 24, 2025

La postura del IMSS

La Representación del IMSS en Quintana Roo emitió un comunicado en el que precisó que el individuo no acudió a solicitar atención médica, sino que fue sorprendido dentro de las instalaciones realizando “actos inapropiados” que incomodaron a los usuarios.

El organismo agregó que no era la primera vez que la misma persona ingresaba al hospital con conductas similares y que, al mostrar un comportamiento agresivo y alterado, personal de seguridad le pidió retirarse, al negarse, se solicitó apoyo de las autoridades competentes.

“El IMSS reitera su compromiso con la salud y el bienestar de su derechohabiencia, bajo la política institucional de cero rechazo en la atención médica de urgencias, al mismo tiempo que salvaguarda la seguridad y el orden en sus instalaciones”, puntualizó la institución.

Debate sobre derechos y seguridad

El caso ha generado debate en torno a la manera en que se aplican los protocolos de seguridad en hospitales públicos, por un lado, el IMSS subraya su obligación de garantizar la integridad de los pacientes y trabajadores; por el otro, persiste la percepción ciudadana de que existen barreras burocráticas para acceder a los servicios de salud.

Organizaciones sociales han recordado que, conforme a la Ley General de Salud, la atención de urgencias debe otorgarse sin importar la afiliación, lo que mantiene bajo escrutinio la actuación del hospital.

El incidente en el IMSS de Chetumal evidencia la tensión entre dos demandas, la seguridad institucional y el derecho de los ciudadanos a recibir servicios médicos sin trabas.

Aunque la institución sostiene que se trató de un problema de comportamiento y no de salud, la percepción pública apunta hacia la necesidad de protocolos más claros y sensibles, sobre todo en una entidad donde el acceso a los servicios médicos es una demanda constante.

Con información del Sistema de Noticias CAMBIO 22

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