Puerto Arturo Busca Medir su Fuerza Agrícola para Impulsar Inversión y Carreteras

Redacción / CAMBIO 22

JMM, 22 de septiembre. – En el municipio de JMM, donde el limón, la sandía y la calabaza se abren paso entre la tierra fértil, la comunidad de Puerto Arturo enfrenta un reto: no sabe con certeza cuánto produce al año. El comisariado ejidal, Amelio Mukul Pinto, considera urgente un proyecto que permita cuantificar y ordenar la riqueza que genera esta zona, una de las más productivas del municipio.

“Sabemos que aquí se cosechan más de 22 variedades, pero no tenemos un control real de las toneladas que salen cada temporada. A veces la lluvia asegura las cosechas, otras veces la falta de agua echa a perder el trabajo de meses. Por eso es necesario un conteo oficial que muestre el verdadero potencial de Puerto Arturo”, explicó Mukul Pinto.

El dirigente recordó que, años atrás, la producción agrícola fue tan abundante que justificó la modernización de la carretera de la zona. Hoy, insiste, un registro confiable de la producción podría abrir la puerta a nuevas inversiones y mejoras en caminos rurales, indispensables para sacar la mercancía en buenas condiciones.

El proyecto, dijo, podría apoyarse en la experiencia de Candelaria, donde existió un centro de acopio con capacidad para llevar el control de los volúmenes de venta. “Con datos precisos, el gobierno puede ver la magnitud de la producción y respaldar con proyectos de infraestructura. No es lo mismo decir que producimos mucho, a mostrar cifras claras en papel”, subrayó.

Actualmente, Puerto Arturo y sus comunidades vecinas —Sabán, Carolina, Kancabchen, Othón P. Blanco y Candelaria— concentran la mayor actividad agrícola de José María Morelos. Limón, sandía, calabacín, chihua, maíz y hasta mango forman parte del abanico productivo que, sin embargo, sigue sin una medición formal que respalde su importancia económica.

Mukul Pinto sostuvo que la propuesta no solo daría certeza a los productores, sino que reforzaría las gestiones para mejorar carreteras y caminos de saca cosechas. “Las vías ya tienen décadas, están deterioradas. Si se demuestra con números el volumen que se mueve, se vuelve más fácil justificar la inversión”, comentó.

En la mesa, la discusión ya no es si Puerto Arturo produce mucho —eso lo saben los campesinos y lo confirmaron incluso ante la gobernadora en su reciente visita—, sino cómo lograr que esa abundancia se traduzca en infraestructura, apoyos y futuro para una de las zonas agrícolas más dinámicas del municipio.

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