La Sensibilidad y Originalidad de la Fotógrafa Mexicana Graciela Iturbide
19 Ago. 2025
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La lente de la mexicana ha cautivado a propios y extraños con su sensibilidad
Redacción / CAMBIO 22
La legendaria fotógrafa mexicana Graciela Iturbide cuenta con una potente carrera. Este 2025 fue galardonada con el prestigioso Premio Princesa de Asturias de las Artes 2025. El mundo reconoce una mirada que va más allá de lo visible y nos invita a reflexionar sobre nuestra propia existencia.
Iturbide, nacida en Ciudad de México el 16 de mayo de 1942, no solo tomó fotografías; ella construyó un universo. Su trabajo es un puente entre lo primitivo y lo contemporáneo, la crudeza de la realidad social y la magia de un instante. El jurado del premio lo ha dicho claro: sus imágenes son tan potentes que te obligan a mirar más allá de lo evidente.

Su viaje en la fotografía comenzó cuando estudió cine, pero su verdadera pasión estalló al ser alumna del maestro Manuel Álvarez Bravo. De él, no solo aprendió la técnica, sino también una forma de ver el mundo. A principios de los años 70, dejó a un lado el cine para acompañar a su mentor en sus recorridos por México. Sin embargo, pronto encontró su propio camino, creando un estilo inconfundible en blanco y negro que ha recorrido el mundo.

“Para mí las fotos son la manera de conocer el mundo. Y pasas del ser humano al paisaje. Y ahora el principio del mundo”, dijo en una entrevista en 2022.
Las obras que la inmortalizaron
Si hay un nombre en la fotografía mexicana que resuena con fuerza, es el de Graciela Iturbide. Su obra no solo ha sido exhibida en los museos más importantes del mundo, como el Centro Pompidou en París, sino que ha dejado una huella imborrable en la historia del arte.

Entre sus trabajos más icónicos se encuentran:
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La serie sobre los indios seris en el desierto de Sonora.
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Su obra maestra “Juchitán de las mujeres”, un libro que captura la fuerza y la cultura de un pueblo en el estado de Oaxaca.
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La serie sobre la India, una colaboración con el fotógrafo brasileño Sebastião Salgado.
“Para ser buen fotógrafo hay que tener pasión y disciplina, nada más. Y puede ser a la vuelta de tu casa si quieres”, afirmó.
Su legado es un recordatorio de que la belleza y la profundidad pueden encontrarse en cualquier rincón, solo si sabes cómo mirar.
Un premio con sabor a historia
El Premio Princesa de Asturias es uno de los más prestigiosos en el mundo iberoamericano. Este año, el galardón de Artes se suma a la lista de grandes talentos que lo han recibido, como el cantautor español Joan Manuel Serrat, la actriz Meryl Streep y el cineasta Pedro Almodóvar.

Este reconocimiento, dotado con 50,000 euros y una escultura de Joan Miró, es un merecido honor para Graciela Iturbide. Su obra no solo es un registro visual de un momento en el tiempo, sino un reflejo del alma humana, sus rituales y su conexión con la naturaleza.
Actualmente la fotógrafa tiene una exposición en la Casa de México en Madrid donde las obras capturadas en distintos rincones del mundo en compañía de su lente han sido vistas por miles de madrileños y visitantes.
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Iturbide ha puesto el nombre de México en lo más alto, demostrando que su mirada es una de las más valiosas que existen.
Fuente: El Animal Político
KXL/RCM





















