Radionovelas: El Arte Sonoro Que Hizo Llorar a México y Hoy Sobrevive en la Memoria
2 Jun. 2025
Historias como Kalimán, Corona de Lágrimas y Porfirio Cadena marcaron generaciones cuando la radio era el corazón del hogar.
Desde 1932, las ondas hertzianas llevaron emoción, drama y fantasía a cada rincón del país, antes de que la televisión lo cambiara todo.
Redacción/CAMBIO 22
Donde quiera que vayas, se tú, marca tu camino y plasma tu sello, no imites a nadie, se original y siempre haz el bien.
¡Alicia, Alicia!…¡Ella era una flor en el pantano!…..¡Caballero con los hombres, galante con las mujeres, tierno con los niños, implacable con los malvados, así es Kaliiimán, el hombre increíble!.
¿Recuerda usted estas frases difundidas por la radio allá en los años sesentas?, se trata de algunas de las radio novelas de éxito en la época, algo muy bonito para quienes atravesamos ese tramo de la vida; Hoy la tecnología lo ha borrado todo.
La primer radio novela que se transmitió en México fue “Los tres mosqueteros” en el año de 1932 por la XEW de la ciudad de México, peeero fue hasta 1941 cuando este género cobró auge con “Ave sin nido”, lo cual obligó a pasar al aire hasta cinco radio novelas por día.
Y es que nuestros padres y abuelos escuchaban la radio con pasión, no había más, la televisión apenas empezaba y los cines eran escasos, de manera que hasta en la más humilde de las casas y en el último rincón de la sierra a la costa, penetraban las ondas hertzianas.
Recordamos a nuestros tíos y familiares cuando se sentaban al lado de una mesa donde estaba el radio receptor escuchando y viendo de frente el aparato como queriendo escudriñar y observar lo que pasaba con cada jugada del beis bol narrada por don Agustín D Valdez.
O nuestra madre o abuela observando concentrada el radio para descifrar la trama de “Corona de lágrimas”, “Chucho el Roto”, “Porfirio Cadena, el ojo de vidrio”, Kalimán o “Los Angelitos negros”.
Nunca olvidamos aquella tarde que llegamos a la casa de nuestra abuela Angelita Picos, ubicada a la orilla de un estero hermoso, amenizado por el canto de palomas y gaviotas que la sorprendimos inmersa en un mar de lágrimas.
“¿Por qué lloras abuelita?”.. ”Hay hijo es que doña Refugio no tiene que dar de comer a sus tres hijos Patricio, Edmundo y Nacho, el malvado de su padre los abandonó”.. “¿Y dónde están?” –Le preguntamos- “No sé, lo escuche en la novela de “Corona de lágrimas en el radio”.. ¡Que golpe tan duro!.
Fuente: Debate
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