Elección en Veracruz: la Licuadora Partidista

Benito Jiménez / CAMBIO 22

Veracruz llega a una elección para renovar ayuntamientos con una violencia inusitada contra candidatos y militantes, con un nepotismo disfrazado en aspirantes, con partidos desgastados, árbitros sin voz y más de la mitad de la población en condiciones de pobreza, ávidos de programas sociales.

La Gobernadora Rocío Nahle, aún beneficiada del lopezobradorismo, apuesta a los mismos sectores que le dieron el voto para que en esta ocasión triunfen sus candidatos.

Aquellos sectores del priismo añejo, del fidelismo y del duartismo, ahora están con Morena, tales como cañeros, petroleros, piñeros, cafetaleros, pescadores, de acuerdo con fuentes del sector productivo.

Sin embargo, no todo lo que brilla guinda es Morena o de la simpatía de la Mandataria. Esto porque en política, la entidad está marcada por dos bloques: Movimiento Ciudadano (MC) y Morena, son los únicos partidos políticos que registraron 212 planillas de igual número de municipios.

Analistas políticos en la entidad suponen una alianza entre Dante Delgado, ex líder de MC y la Gobernadora morenista Rocío Nahle, en el conflicto que tienen juntos con el ex Mandatario panista Miguel Ángel Yunes Linares.

Parte de la familia Yunes, como el Senador Miguel Ángel Yunes Márquez no acaban de concretar su ingreso a Morena, precisamente por el rechazo de Nahle. Estas dos fuerzas, la de los Yunes contra Morena y MC, han provocado un río revuelto.

“Estamos viendo como una especie de licuadora partidista en Veracruz, donde los candidatos que hoy son del PAN, antes eran de MC, por ejemplo, candidatos de Morena antes eran de Acción Nacional, pero por sí solos, al salirse Miguel Ángel Yunes, el PAN es un cascarón, y por ahora es muy difícil que haya una reinvención del PRI”, opina el sociólogo veracruzano Eduardo de la Torre.

Recuerda el caso de José María “Chema” Martínez, quien en 2018 fue senador por el PAN, y, después de 27 años de militancia en el blanquiazul, hoy es un fiel morenista. La pelea por las candidaturas han resultado en el cambio de cachuchas. Hipólito Deschamps, excandidato a Gobernador por el PAN, pasó a Movimiento Ciudadano, y luego terminó en Morena, donde fue postulado para la Alcaldía de Alvarado. Otros casos similares son los de Raúl Zarrabal (del PRI a MC), Monserrat Ortega (del PAN al PRI), y Luis Vicente Aguilar (del PT a Morena).

“La otra es el priismo, que va descendiendo, que va teniendo problemas digamos de estructura, ahora tenemos a priistas también metidos en Morena, digamos este fenómeno lo estás viendo. Sí, el Morena en Veracruz es el PRI de Veracruz, y otra parte del viejo PRI es lo que está en el Verde Ecologista, que es representado por el hijo de Fidel Herrera, que es el líder más visible del Verde en Veracruz, y mucha gente ama a Fidel Herrera, se mantiene en el Verde”, expresa un funcionario electoral en el estado.

“Entonces Morena va a ganar varios municipios con personajes netamente priistas, es más, la gran molestia de la base de la militancia de Morena es que no les dieron las candidaturas, los hicieron a un lado, eso fue un fenómeno en Veracruz”, añade el funcionario. El PT no forma parte de la coalición de Morena-Verde, y ahora jugará sólo en la elección municipal.

Con esto, en Veracruz la Oposición es realmente inexistente. “Tenemos una Oposición que no critica a la Gobernadora porque son comparsas del régimen. Al final, lo que se va a definir en Veracruz, más allá del poder político, es el reacomodo de los grupos ilegales (crimen) del norte al sur. Grupos ilegales que están financiando estos grupos”, insiste De la Torre, profesor de Derecho en la Universidad Veracruzana.

“Y hoy dependen los políticos de esos grupos ilegales. El caso más evidente es Morena, que tú veías candidatos que no tenían ni para pagarse un taxi, y después de que son candidatos, pues el financiamiento les viene extremadamente extraoficial, diría yo”, indica. A su juicio, en Veracruz nadie sanciona la ilegalidad.

“Tienes un OPLE, que es la ‘Secretaría de Elecciones’ del Gobierno en turno. Tienes un Tribunal Electoral de Veracruz que no se ha atrevido ni siquiera a emitir sentencias que le pueden favorecer a la Oposición”, advierte.

“Es decir, hoy Veracruz, en el ámbito electoral, estamos como en el duartismo sin (Javier) Duarte, con un total control del OPLE, el total control del Tribunal Electoral de Veracruz, y tienes una sala regional del Tribunal Electoral que es zombi ante la democracia. Si a eso le agregas que tenemos un desastre en la elección del Poder Judicial Federal y Local, que está contaminando la elección municipal y que el abstencionismo va a ser muy alto, esto se parece a las elecciones municipales de octubre de 1988”, reflexiona el académico.

Mientras los priistas de hueso colorado trinan contra el régimen, los mapaches y siervos morenistas andan sueltos. Veracruz cerró un mes de campañas dejando una huella violenta con seis políticos asesinados, entre ellos dos candidatos, así como una decena de ataques y amenazas en la renovación de sus 212 Ayuntamientos.

Para las autoridades policiacas y del Ejército, estos ataques son inéditos. Las amenazas a las víctimas fueron directas. “O te bajas o te bajamos”, fueron parte de las amenazas a un candidato en Perote, revelan fuentes ministeriales. Por otra parte, la violencia en el estado sigue la misma tendencia que con la gestión de Cuitláhuac García. En el primer cuatrimestre de 2025, Veracruz suma 302 asesinatos. En el mismo periodo de 2024, la entidad acumuló 301 crímenes.

“Hay ánimos caldeados entre los simpatizantes, sobre todo porque Morena no tiene el carro completo, toda la gente que era de Cuitláhuac García está limitada, no tiene juego, es más, ni se menciona al ex Gobernador en este ámbito electoral, hasta les da pena mencionarlo, entonces la mayoría de candidatos son de Rocío Nahle, algunos son de (senador) Manuel Huerta, que fue muy fuerte en la defensa estatal de Morena, pero aún con eso Morena, por sus propias fracturas, no aspira a un carro completo”, indica una fuente electoral.

Ese tenor puede desbordar más violencia, incluso en el tema post electoral, en la llamada defensa del voto, advierten. Al clima de violencia se suma que entre las 212 planillas, en unos 80 municipios, el candidato a Presidente Municipal era la esposa, el esposo, el hermano, el cuñado, la hija, el hijo o “algo de familia” del Edil en funciones.

“Eso provocó que las bases no fueran consultadas, entonces los alcaldes impusieron no sólo a sus sucesores sino sindicaturas, regidores, y pusieron a gente de mucha confianza, y los morenistas, el que construyó, el que venía de abajo, ahí les dejaron las regidurías en los mejores casos, entonces vamos a ver a muchos priistas ya como Presidentes Municipales, sobre la gente de Morena o del Verde, molestos”, opina un mando de seguridad en el norte de Veracruz.

Por sí mismo, en Veracruz, los mismos morenistas reconocen que el PRI puede retener Orizaba, Cosoleacaque y Perote, municipios importantes, mientras que el PAN haga lo propio en municipios principalmente costeros. “La problemática dentro de Morena hace que pierda Morena, no definen las candidaturas desde las bases”, reprocha un morenista de Medellín. El otro reclamo de los aspirantes es la ambición a los cargos.

Un caso son los Guzmán Avilés en Tantoyuca, donde Joaquín Guzmán busca su cuarto mandato como Alcalde. Su familia ha controlado el municipio por tres décadas, intercalando cargos entre hermanos, esposas, hijos, sobrinos y amigos. En Hueyapan de Ocampo, los Gómez Cazarín han sido señalados por imponer a familiares en candidaturas de Morena.

En Alto Lucero, el PT postuló a Constantino Aguilar, cuyo sobrino es el actual Alcalde; en Cosoleacaque, Cirilo Vázquez Parissi busca eternizarse en el cargo, y en Comapa, el Edil Gabriel Lagunes Jáuregui quiere heredar el cargo a su hermana Nora Jessica Lagunes Jáuregui.

En tanto, el OPLE archiva las quejas. Ha recibido más de 400 observaciones por uso indebido de recursos públicos, actos anticipados de campaña y entrega de dádivas. Todo el abono para la violencia.

“Los candidatos que hoy son del PAN, antes eran de MC, por ejemplo, candidatos de Morena antes eran de Acción Nacional, pero por sí solos, al salirse Miguel Ángel Yunes, el PAN es un cascarón, y por ahora es muy difícil que haya una reinvención del PRI”, dice De la Torre

Fuente:  Reforma

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