Desde el Corazón de José María Morelos Nació Doña X-Lupe: la Historia de Ricardo Canul, un Joven que Transformó la Adversidad en Risas y Amor por la Comedia

•  Ricardo Canul no solo interpreta, sino que escribe, organiza, dirige y produce cada presentación

• Entre risas, lágrimas, esfuerzo y pasión, Doña X-Lupe y los Wiros se han convertido en un símbolo de resiliencia artística

Redacción / CAMBIO 22

JOSÉ MARÍA MORELOS a 28 de mayo.— Lo que comenzó como un sueño de adolescente tímido, hoy es una realidad que arranca carcajadas, aplausos y reflexiones. Ricardo Canul, joven originario de José María Morelos, Quintana Roo, es el creador del entrañable personaje de comedia Doña X-Lupe, una figura que ha logrado conquistar los escenarios, redes sociales y el cariño del público con una historia de vida marcada por la discriminación, la perseverancia y la creatividad.

El camino comenzó entre los años 2012 y 2014, cuando Ricardo, entonces con apenas 14 o 15 años, le compartió a un maestro de danza folklórica su inquietud de crear un personaje femenino inspirado en la comedia yucateca. Sin embargo, esa primera chispa fue opacada por la discriminación que enfrentó al hablar de su proyecto, lo que lo llevó a retirarse temporalmente.

Con el paso del tiempo, Ricardo retomó su camino artístico. En 2019 incursionó en shows infantiles y, más adelante, en el 2023, en la radio local BoomFM, donde dio un salto importante su principal personaje: “Doña X-Lupe”, una versión preliminar de lo que hoy sería su personaje estrella.

Desde entonces, Doña X-Lupe y su familia de personajes como La Chikys han llevado alegría a diversos rincones del estado. Su primer gran proyecto fue la obra teatral Doña Lupe y su hijo… ¡Ay qué hijo!, una puesta en escena a beneficio de un grupo juvenil femenino. El éxito fue inmediato, lo que les permitió comenzar a producir sketches, eventos privados, funciones comunitarias y presentaciones en ferias y poblados de Yucatán y Quintana Roo.

Ricardo Canul no solo interpreta, sino que escribe, organiza, dirige y produce cada presentación. “Este proyecto no es solo mío, es de cada persona que nos ve, que se ríe, que nos sigue y que cree en nosotros”, afirma. Y así, entre risas, lágrimas, esfuerzo y pasión, Doña X-Lupe y los Wiros se han convertido en un símbolo de resiliencia artística.

Hoy, con nuevos proyectos en puerta y una comunidad de seguidores en crecimiento, Ricardo continúa escribiendo la historia de Doña X-Lupe: una historia que apenas comienza, pero que ya ha dejado una huella imborrable en el arte popular del sur de Quintana Roo.

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