• Además de que también permitirá conocer y documentar a la fauna local

 

 

  • No hay denuncias hasta el momento porque no cuentan con evidencias para proceder, pero con estos dispositivos podrían empezar a actual al respecto

 

 

 

 

Laura Beytia/CAMBIO 22

CHETUMAL, 26 de mayo.- Las cámaras trampa, tienen como objetivo captar en foto y video, el comportamiento de las diversas especies que habitan en la región y de las que están en peligro de extinción en su desempeño habitual, aunque de igual manera, sirven para detectar a los cazadores furtivos, que aún son una seria amenaza para la fauna local.

En este sentido, el presidente del comisariado ejidal de La Península Roberto Salgado Sangri, informó que están trabajando en coordinación con el Instituto de Biodiversidad y Áreas Protegidas del Estado de Quintana Roo (IBANQROO) en actividades tendientes a la conservación, por lo que se instalarán estos dispositivos en este núcleo ejidal y así sumarse a los demás ejidos que ya cuentan con estos equipos para un monitoreo más puntual.

“Desde el mes de marzo se inició con la instalación de cámaras trampa, es un programa que tiene el Ibanqroo para detectar fauna en los ejidos y tener un inventario de lo que existe, hasta el día de hoy llevamos unas 10 entre todos los ejidos que también ponen cámaras propias y mañana van a instalar 5 en el ejido La Península, estamos hablando de un monitoreo de casi 50 mil hectáreas por el problema de los cazadores furtivos, es un problema que tenemos latente en todos los ejidos, por eso nosotros tratamos de mantener la vigilancia y de persuadirlos para evitar que acabemos con el atractivo que tenemos.”

Destacó que en los ejidos como Laguna Guerrero y La Península, se ha podido detectar la presencia de jaguares, pumas, tapir, faisán, pavo de monte, puerco de monte y otras especies de aves endémicas, por lo que es indispensable establecer mecanismos para su protección, aunque son los propios ejidatarios que con sus medios, intentan cuidar y preservarlos, a través del programa de guardianes comunitarios que implementó la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente.

Ya que no únicamente se trata de la caza que realizan, sino de la extracción de maderas preciosas, aunque no han logrado interponer denuncias ante la autoridad correspondiente, porque ingresan de noche o de madrugada a las reservas y no han podido obtener las pruebas necesarias para actuar al respecto.

“Existen muchos cazadores furtivos que de repente llegan y en toda esta región existe un cuerpo de guardianes comunitarios que es integró la Sema y ahí participan ejidatarios que son los que vigilan la extracción de madera o de especies endémicas que están normadas y la cacería furtiva, pero no hay denuncias porque es un poco complicado, es difícil detectar a los cazadores furtivos porque entran de noche o de madrugada y para poner una denuncia tenemos que tener evidencia física por lo que tratamos de mantener la vigilancia para que no accedan a los sitios.”

Añadió que no existe una cantidad especifica de cuántos cazadores furtivos ingresan a los ejidos, a pesar de que se habla de alrededor de 100, pero ahora con las cámara trampa, se espera precisar el número de los depredadores en las zonas de conservación e iniciar procedimientos legales.

 

 

 

lau.beytia@diariocambio22.mx

LRE

 

 

 

 

 

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